México, 11 jul (EFE).- La Escuela Estatal de Ballet de Berlín (Staatliche Ballettschule Berlin) buscó este jueves nuevos talentos en México, la tierra que vio nacer a Elisa Carrillo, una de las más importantes figuras de la danza en la actualidad.
Fue una labor de tanteo que se realizó a través de las audiciones programadas en el Teatro de las Artes, en el Centro Nacional de Las Artes, en las que estudiantes de danza de entre 10 y 16 años se enfrentaron a diversas pruebas para poder acceder a la prestigiosa escuela alemana.
Los aspirantes procedían de la Ciudad de México y 22 estados del país, entre ellos Estado de México, Puebla, Aguascalientes, Yucatán, Querétaro, Hidalgo, Guanajuato, Veracruz, Colima, Jalisco, Baja California y Tabasco.
Todos los asistentes llegaron a la capital repletos de ilusión y nervios con el fin de participar en estas audiciones -que se realizaban por primera vez en México- y conseguir una de las tres becas completas ofrecidas por la Escuela Estatal de Ballet de Berlín.
Unas ayudas que incluirán transporte, gastos de matriculación y manutención durante un año.
Incluso, se añadieron otras cinco becas adicionales de colegiatura, siempre atendiendo al talento de los participantes.
Por tanto, los nervios de los participantes estaban a flor de piel. Todos querían hacer realidad sus sueños y conseguir una de las suculentas ayudas.
Elisabeth Lomelí era un ejemplo del nerviosismo de los asistentes, a pesar de tener experiencia en la disciplina al llevar siete años bailando. «Me encanta la danza y qué mejor forma de salir a otras partes del mundo que compartiendo este arte», declaró a Efe.
Su maestra, Mónica Ramírez, se mostraba muy optimista. «Veo a Elisabeth muy contenta, emocionada y entusiasmada» con las pruebas, indicó.
Entre los directores de las audiciones estuvo la propia Elisa Carrillo, quien -además de dar lecciones de danza a los participantes- fungió como parte del jurado del proceso selectivo.
La presencia de esta creadora, galardonada en mayo pasado con el prestigioso premio Benois de la Danse en Rusia, impulsó a participar en la cita a varias de las asistentes. Fue el caso de Dulce Aguilar, que estudia danza en Nueva York.
«Elisa Carrillo ha sido mi mayor inspiración desde que yo tenía 11 o 12 años», dijo a Efe.
Una opinión compartida por Jimena Legorreta, otra de las asistentes. «No vivo en México (está formándose en Washington) pero me encanta tanto mi país como Elisa Carrillo, que es mi mayor inspiración», confesó.
Otro de los miembros del tribunal calificador de las audiciones fue Marek Rozycki, director artístico de la Escuela Estatal de Ballet de Berlín y del Berlin Youth Ballet.
«El objetivo de las audiciones es tratar de encontrar a los estudiantes más talentosos», señaló a Efe.
En este sentido, Rozycki aseguró que el nivel de los asistentes a la cita de este jueves fue muy bueno. «Pienso que en México hay un gran talento entre los estudiantes», manifestó.
El proceso de selección comenzó en junio pasado, cuando se difundió la convocatoria a través de redes sociales. A la misma se presentaron 228 candidatos, de los que -tras la aplicación del primer filtro- quedaron los 174 que acudieron este jueves a Ciudad de México.
Estas audiciones, que estuvieron patrocinadas por la Fundación Elisa Carrillo Cabrera, se enmarcaron dentro de «Danzatlán. Festival Internacional de la Danza».
Esta iniciativa se está desarrollando en Ciudad de México entre el 2 y el 13 de julio, con la entrega del Premio Benefactor de la Danza y con «Giselle», a cargo de Kristina Kretova, primera bailarina del Ballet Bolshói.
«Uno de los objetivos de Danzatlán es generar un diálogo en México entre coreógrafos, bailarines y especialistas del mundo de la danza, nacionales e internacionales, además de dar proyección internacional a artistas y talentos del país», aseguraron los organizadores.