La higiene no es el fuerte de los establecimientos del ramo gastronómico, pues un alto porcentaje de los mismos acusa problemas de fauna nociva que compromete la sanidad de los alimentos y la salud de las personas, aseguró el director de Regulación Sanitaria, Faustino Piñón Ramos.
Sostuvo que de acuerdo a las verificaciones realizadas en los establecimientos del área de Productos y Servicios, las cuales sumaron tan sólo el año pasado 3,950, el de la presencia de fauna nociva resulta ser un problema muy frecuente, por lo que muchos negocios dedicados a la elaboración, distribución y comercialización de alimentos fueron suspendidos por esa situación.
“Lo principal que nosotros hemos encontrado como anomalías, es sobre todo la presencia de fauna nociva, como es el caso de las cucarachas, tecuejos, ratones y otras deficiencias en la higiene, por lo que en estos casos se ha procedido para evitar riesgos a la salud de las personas por la ingesta de alimentos contaminados”, subrayó.
Ante ello, añadió, se da la asesoría y se realiza el fomento sanitario, para que los propietarios o responsables de los establecimientos que manejan alimentos y bebidas puedan llevar a cabo sus actividades de mejor manera. “En estos casos como se consideran anomalías graves se procede a la suspensión del servicio del establecimiento, para que ellos tengan oportunidad de hacer las correcciones necesarias”, precisó.
El funcionario indicó que en lo que se atienden las recomendaciones de las mejoras en las instalaciones y en el manejo mismo de los alimentos, los establecimientos permanecen sin actividad, precisamente para eliminar los riesgos hacia la salud de los comensales que acudan a los negocios con presencia de fauna nociva.
En ese sentido, explicó que “dentro de las actividades de la Dirección de Regulación Sanitaria está el realizar vigilancia sanitaria en establecimientos que se dedican a la venta de alimentos, los cuales deben de cumplir con lo que la ley establece para poder garantizar que no existan riesgos para los consumidores, por lo que cotidianamente se está trabajando en esto, al igual que en los demás giros relacionados con lo que son los servicios de salud, insumos para la salud y salud ambiental, además del área de productos y servicios”.
Piñón Ramos indicó que en la vigilancia de los establecimientos del giro de alimentos se revisa la infraestructura de los negocios, los servicios de agua potable, los drenajes, el manejo de desechos, el equipo y control de plagas, mientras que al personal del área de proceso se le evalúa su pulcritud y sus buenas prácticas de higiene, sanidad, precisamente para evitar riesgos en la preparación y manipulación de los alimentos que se sirven a los comensales.