Aunque las flores siempre serán un excelente regalo o adorno para alguna presentación, las de cempasúchil tienen una característica especial y su significado hace que se convierta en la preferida para estos días previos a la celebración del Día de Muertos.
Por doquier es posible observar los primeros altares de muertos y arreglos con motivo de esta festividad mexicana, en donde predominan estas flores amarillas que científicamente llevan por nombre “Tagetes erecta”, pero que tiene una denominación popular que viene de la palabra náhuatl “cempohuaxochitl” que se traduce como 20 flores o de los 400 pétalos.
Es esta flor y otras que también están ya en los anaqueles, maceteros y comercios, como la nube, terciopelo y hojas de palma, uno de los elementos que dan colorido al Día de Muertos que ya es esperado por muchos y que desde ahora ya se utiliza para los altares y arreglos en las calles y casas con este motivo.
Las plantas del cempasúchil eran abundantes en la región centro del país todavía hasta mediados del siglo pasado y esto se mantiene, aunque son 5 los Estados que se encargan de la mayor parte de la producción total de esta flor que permite presentar las ofrendas especiales a los seres queridos que han partido de este mundo terrenal.
Según información de la SAGARPA, la mayor parte de la producción de esta flor se concentra en 5 entidades del país, siendo así que San Luis Potosí aporta el 3.9% del total de esta planta que se encuentra en el mercado nacional, Tlaxcala participa con el 3.10%, Guerrero con un 5%, Hidalgo con el 5.7 y Puebla es infinitamente el más alto productor de cempasúchil con el 76.6%.
Al menos esos son los datos que se tuvieron hasta el año pasado y en esta ocasión, bastará saber el movimiento del mercado en esta época para saber a cuánto ascendió la producción. El año pasado la cosecha fue de alrededor de 17 mil toneladas de esta flor, 3 mil toneladas más que en 2017, de ahí que cabe la posibilidad que este 2019 también haya crecimiento.
Doña Juanita, comerciante de flores en el Mercado Terán, uno de los tradicionales de Aguascalientes y que se le identifica también como el “mercado de las flores”, refirió que para los que están en este giro, tienen en esta temporada otra buena época para mejorar sus ventas, sobre todo porque el tipo de flores que pide el cliente son muy específicas.
“Aquí tenemos de todo, rosas, alcatraces, violetas, girasoles y podríamos decir muchísimos tipos de flores, pero las que más pide la gente en este tiempo sin duda es el cempasúchil y la nube, aunque también hay quienes quieren claveles, tenemos de todo. Lo que es claro es que cada vez la gente pide menos coronas y demandan más arreglos tipo maceta”.
Mario Cervantes, cada año pide un permiso especial para vender flores sólo en esta temporada y se instala cerca de los panteones para así estar a la orden de la gente que en estos días van a visitar a los camposantos a sus seres queridos.
Comentó que esta flor es muy noble, pues es duradera, tarda en marchitarse, su color es llamativo y festivo, además los tantos pétalos que rodean al tallo hace que sea una planta especial. Además su precio está al alcance de toda la gente pues los precios a que se pueden encontrar rondan los 20 pesos un ramo con 10 flores.
La florista Mariana de la Rosa comentó que los pétalos y colores del cempasúchil son sin duda el distintivo del culto a los muertos en México y su color amarillo evoca al sol, que según la tradición azteca guiaba las almas de los fallecidos.
Quienes saben de la herbolaria dijeron que en otros tiempos esta flor también es utilizada como medicina, pues se presume que ayuda a aliviar los cólicos y a combatir los parásitos intestinales, obviamente en forma de té.
Lo cierto es que dada la abundancia de estas flores durante esta temporada y que pasado el tiempo se secarán, tienen una característica especial, toda vez que se pueden convertir en un excelente abono orgánico que permite combatir las plagas de algunos cultivos, principalmente las que atacan al tomate.