México, 16 oct (EFE).- La mitad de los mexicanos aseguró entender mejor el nuevo etiquetado frontal de los alimentos procesados y refrescos implantado en el país desde el 1 de octubre, según una encuesta divulgada este viernes por el periódico local Reforma.
El nuevo etiquetado, con frases como «Exceso de grasas» o «Exceso de calorías» y una presentación muy clara, ha ayudado a mejorar la comprensión del 50 % de la población sobre los alimentos, mientras un 19 % consideró que la norma no le ha hecho entender mejor la información nutricional. Mientras que el porcentaje restante no sabe o no contesta.
También el 50 % aseguró que esta manera de presentar las características de los productos le ayuda más a tomar una decisión de compra, por un 25 % que no considera este etiquetado de mayor ayuda para decantarse por un alimento u otro.
El 37 % de los encuestados dijo revisar siempre o la mayoría de veces el etiquetado de los alimentos y bebidas antes de adquirirlos, aunque el 35 % contestó que rara vez o nunca lo hace.
Las nuevas alertas nutricionales ayudarán a reducir la obesidad infantil según el 46 % de las respuestas y la obesidad en adultos según el 45 % de los participantes.
Asimismo, el etiquetado contribuirá, para el 42 % de los consultados, a mejorar los índices de México en hipertensión y diabetes, y un punto menos (41 %) opinaron que ayudará también a atajar las enfermedades del corazón.
Sin embargo, una gran mayoría del sondeo, el 64 %, señaló que la mejor estrategia para hacer que México abandone la cabeza mundial en obesidad infantil y la segunda plaza en obesidad está en la enseñanza de mejores hábitos alimenticios.
La encuesta se realizó del 9 al 12 de octubre a nivel nacional, con 400 participantes por vía telefónica.
La obesidad es un problema de salud que le cuesta México el 5,3 % del producto interno bruto (PIB) al afectar a tres de cada cuatro mexicanos, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
La nueva Norma Oficial Mexicana 051, premiada por Naciones Unidas y la Organización Mundial de la Salud (OMS), combatirá con advertencias frontales en envases la epidemia de obesidad de México con etiquetas en forma de octágonos negros que alertan sobre «exceso de calorías» u otras sustancias como azúcares, sodio y grasas, y la presencia de edulcorantes.
El modelo, muy criticado por la industria de alimentación, se basa en uno adoptado en 2016 por Chile, donde cayó 25 % la compra de bebidas azucaradas, 17 % la de postres envasados y 25 % el contenido promedio de azúcares en los productos, según un estudio de la Universidad de Chile y el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).