CIUDAD DE MÉXICO, diciembre 18 (EL UNIVERSAL).-
«El Chavo del 8» fue una producción nacional que trascendió fronteras con su exitosa historia y personajes. Pero, así como tuvo aspectos realmente positivos como los niveles de audiencia y las retransmisiones en cientos de países, también es cierto que algunos de los integrantes del elenco no tuvieron una buena relación luego del fin del rodaje.
Si bien «Chespirito» le dio vida a los personajes de «la vecindad» y a un guion que quedará en la memoria y en el corazón de millones de televidentes, también es cierto que tuvo batallas judiciales y conflictos por los derechos de autor de algunos de ellos, como «La Chilindrina» y «Quico». También se originaron algunos roces entre algunos actores y Florinda Meza.
Pero ninguno de estos casos fue el de Rubén Aguirre, el actor que encarnó al educador más paciente de «la vecindad»: «El Profesor Jirafales». Este personaje también mantuvo un eterno coqueteo con «Doña Florinda», quien era interpretada por la esposa de «Chespirito», Florinda Meza.
Mientras que algunos artistas renunciaron al elenco de la producción, Rubén Aguirre fue uno de los que se mantuvo en cordial contacto con Roberto Gómez Bolaños e incluso respondió a un pedido muy particular del director de «El Chavo del 8». En sus últimos años de vida, Chespirito mantuvo conversaciones con quien supo ser «El Profesor Jirafales» y en una de esas charlas fue que le pidió algo especial.
Al consultarle su compañero de elenco qué podía hacer por él en ese estado de enfermedad, ‘Chespirito’ le pidió a su colega que no dejaran de tener contacto, como lo habían hecho siempre, a través de su relación tan cordial y cercana. Aguirre solía visitarlo a medida que su estado de salud empeoraba, pero cuando no pudo asistir más a su casa por cuestiones médicas estrictas, no dejó de llamarlo y preocuparse por él hasta el 28 de noviembre de 2014, día en que el país perdió a uno de sus máximos comediantes.