La Unión Europea se mostró este martes «preocupada» por la reciente ley de medios extranjeros aprobada en Israel que busca limitar las informaciones sobre la guerra en Gaza del canal catarí Al Yazira y exigió que se respete la libertad de prensa, también «en contextos de guerra».
En un comunicado, un portavoz del alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, destacó que «la libertad de prensa debe estar garantizada en todos los lugares, incluidos los contextos de guerra en los que el trabajo de los periodistas y los trabajadores de los medios es esencial para dar una información precisa y oportuna».
«La UE está preocupada por la nueva legislación adoptada que da al Gobierno de Israel poderes temporales para evitar que los medios extranjeros operen en Israel», apunta el comunicado del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE).
La UE reiteró que «muchos periodistas han perdido sus vidas y cientos han resultado heridos desde el inicio del conflicto de Gaza el 7 de octubre», al tiempo que ha condenado sus muertes y ha enfatizado «la necesidad de garantizar su acceso, seguridad y protección en todo momento».
La Knéset (Parlamento israelí) aprobó este lunes una ley que prohíbe de forma temporal la retransmisión en Israel de cualquier medio extranjero que «dañe la seguridad del Estado», y que busca limitar desde hoy las informaciones sobre la guerra en Gaza del canal catarí Al Yazira.
«El canal terrorista Al Yazira ya no transmitirá desde Israel. Tengo la intención de actuar inmediatamente de acuerdo con la nueva ley para detener la actividad del canal», dijo en la red social X el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
La ley otorga al ministro de Comunicaciones el poder de ordenar a los “proveedores de contenidos”, por un plazo renovable de 45 días, el fin de su retransmisión desde el país; además del cierre de sus oficinas, la confiscación de sus equipos y el bloqueo del servidor de su página web.
Estados Unidos mostró este lunes su preocupación por esta ley y la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, declaró que el país cree en «el trabajo de importancia crítica que realizan los periodistas en todo el mundo y eso incluye a aquellos que informan sobre el conflicto en Gaza».
También el portavoz de la secretaría general de la ONU, Stéphane Dujarric, dijo que el cierre de Al Yazira, si se concreta «es preocupante» porque «toda limitación al derecho de los periodistas a trabajar desde cualquier parte del mundo es de gran preocupación».