Las autoridades de Georgia (Estados Unidos) han acusado a tres menores de 11, 13 y 17 años en diferentes puntos del estado por amenazas de tiroteo escolar tras la tragedia del miércoles en el instituto de Winder, en la que otro menor mató a cuatro personas.
Los tres adolescentes han sido detenidos en incidentes separados en los condados de Brooks, Crisp y Valdosta, todos acusados del delito de «amenazas terroristas», aunque al menos dos dijeron que la intención de sus mensajes era una «broma» cuando fueron interrogados.
La Oficina de Investigaciones de Georgia informó del caso del condado de Brooks, en el que un menor de 13 años fue identificado como el autor de una amenaza de tiroteo escolar publicada en una plataforma interna de mensajería para profesores y alumnos.
Este joven, acusado también de «intrusión en una computadora», asistía a sus clases virtualmente y afirmó haber enviado el mensaje «como una broma», pero las autoridades lo arrestaron e internaron en un centro de menores tras consultar con el Departamento de Justicia Juvenil.
Por su parte, la Oficina del sheriff del condado de Crisp comunicó el arresto de un estudiante de 17 años que publicó amenazas de tiroteo escolar en la aplicación de mensajería gratuita TextNow, y dijo que se han registrado sus pertenencias y vehículo, pero no tenía ningún arma.
En el tercer caso, la Policía de Valdosta informó de una «amenaza en redes sociales de que alguien iba a perpetrar un tiroteo escolar» y detuvo a una niña de 11 años que, en el interrogatorio, afirmó que «hizo un comentario sobre hacer un tiroteo escolar, pero era una broma», según un comunicado.
La menor no permaneció detenida y el Departamento de Justicia Juvenil decidió que quedara en custodia de su madre, que la acompañó en el cuestionamiento.
Los incidentes se producen después de que el miércoles un adolescente de 14 años, Colt Gray, matara a cuatro personas e hiriera a otras nueve con un arma tipo fusil semiautomático en su centro escolar, el instituto de secundaria Apalachee de Winder, en el condado de Barrow.
Colt Gray ha sido acusado de cuatro cargos de asesinato y también ha sido imputado su padre, Colin Gray, de 54 años, quien supuestamente le dio acceso al arma, con cargos de homicidio involuntario, asesinato en segundo grado y crueldad infantil; padre e hijo afrontan cadena perpetua.