SAN FRANCISCO DE CAMPECHE, abril 2 (EL UNIVERSAL).-La gobernadora Layda Elena Sansores anunció una “limpia” de 9 policías en la Secretaría de Protección y Seguridad Ciudadana y mantiene como su titular a Marcela Muñoz Martínez.
Layda Sansores, anunció a través de sus redes sociales la destitución de nueve elementos de la policía a los que llamó «canallas y corruptos», pues aseguró que estos policías «han sido denunciados por acosar mujeres, maltratar, corromper y extorsionar a la ciudadanía», por lo que dijo, ha iniciado el proceso de bajas y denuncia de esos delitos.
En su video comenzó hablando y defendiendo al presidente Andrés Manuel López Obrador, y dijo que se le insultó, a él y a su persona con supuestas “noticias falsas”.
Recordó que antes -según ella-: “Y antes por razón de estado terminabas perseguido y te daban 3 opciones: Exilio, encierro o entierro” dijo, y culpó a la oposición quien dijo “lloran su derrota” año con año, supuestamente los de MC y el PRI.
La gobernadora dijo que los policías que se han manifestado se “han dado cuenta de qué pasa” y señaló a 2 hombres, quienes dijo son: “Amos de la tenebra, lobos disfrazados de ovejas, manipulan personas con dineros que vienen de lugares oscuros e inconfesables para alimentar su incontrolable ansia de poder”.
Sin mencionar nombres habló sobre uno quien dijo representa “lo peor del pasado” el otro “representa lo peor que podría pasarle a Campeche en el futuro” y los llamó politiqueros misóginos.
Posteriormente, les dijo a los policías que de los 21 puntos del pliego petitorio se aprobaron todos, con la excepción de “no usar las bodycam” y se agregaron otros 4. De acuerdo a la gobernadora campechana «se les olvidó incluir algo para las mujeres policías».
Señaló al diputado José Luis Flores como un traidor quien abiertamente ha apoyado el movimiento de los policías. Sansores dijo también que está al servicio de un exgobernador, la otra persona a la que se le lanzó en criticas fue a Rafael Yamile.
Sansores dijo que ella no solo «vino a ser gobernadora, vino a combatir la corrupción como lo ha hecho nuestro presidente», y mencionó a algunos de los policías a los que se refirió por sus apodos «Chevy, Chetos y Charmin», asegurando que «no volverán a pertenecer a la policía, porque queremos que la policía se limpie de gente como ustedes».
También mencionó que «una vez destituidos de su cargo, nunca jamás podrán pertenecer a la corporación de la que deberíamos sentirnos orgullosos».
Finalizó diciendo que dará de baja «a los policías que sea necesarios para erradicar la corrupción y el acoso», para así dignificar a la institución policiaca la cual es «vital para conservar la tranquilidad en el estado».