Tras señalar que el tabaquismo incide de manera importante en algunas de las principales causas de muerte entre la población y que pese a ello de manera preocupante quienes inician en ese hábito pernicioso lo hacen cada vez a edad más corta por el supuesto placer que produce fumar, el presidente del Colegio de Médicos Cirujanos de Aguascalientes calificó de incoherente la reforma a la legislación de la materia y dijo que no es por decreto como se logrará que la gente deje de fumar ni siquiera en sitios públicos.
El doctor Guillermo Llamas Esperón indicó que está bien que con las nuevas medidas se busque restringir las áreas o espacios para los fumadores, pero sin embargo poco se logrará si no se educa desde ahora a los niños y jóvenes de los riesgos que provoca el cigarro en la salud y si las tabacaleras no dejan de hacer creer que fumar es placentero y en cierto modo le da un estatus a quienes caen en ese hábito pernicioso.
No es coherente el hecho de que por una parte se apliquen más medidas para el control del tabaco, pero por otro lado haya tolerancia para que se fume incluso en salones de fiestas o que la gente lo haga en corto, en sus casas o en reuniones de amigos, cuando saben que se están provocando daño y exponiendo la salud de la gente.
“Yo pienso que el tabaquismo es uno de los problemas de tipo médico más importantes hoy en día y todo eso es por consecuencia de las facilidades que se les dieron durante muchísimos años a las empresas tabacaleras para la promoción de sus productos, por lo que es muy difícil que ahora por decreto se busque hacer que la gente deje de fumar”, subrayó.
El dirigente de los galenos advirtió que lo que sí es un hecho es que el tabaquismo es un problema de salud muy grave en México y no de ahora sino de mucho tiempo atrás, debido a que las mismas autoridades fueron muy permisivas en todos los sentidos en relación con el cigarro.
Ahora, explicó, es bueno que se busque frenar el problema del tabaquismo con las restricciones contenidas en las reformas a la legislación de la materia, pero también se debe ver la otra parte, la de los fumadores, pero también hay que ser respetuosos de la gente que independientemente de todo quiere fumar, pero que lo haga en sus espacios, eso es claro, por lo que “yo pienso que es correcto que en los restaurantes haya áreas libres de humo y áreas para las personas que quieren fumar, así como también que haya una limitación en el aspecto de la publicitación de los productos de tabaco, aunque creo que es un absurdo que los cigarros no se puedan exhibir en una tienda y que en la televisión salgan anuncios o que haya publicidad estática en sitios concurridos”.