México, 21 oct (EFE).- Colectivos mexicanos LGBT consideraron este miércoles como una «aceptación a medias» la declaración del papa Francisco, quien se pronunció en favor de las uniones civiles homosexuales.
«Es sorprendente, es un giro a la posición que ha tenido la Iglesia católica, la postura del papa de aceptar las uniones civiles entre parejas del mismo sexo», dijo a Efe el representante de la organización Fuera del Clóset, Ernesto Montes de Oca.
El activista aceptó que la declaración del sumo pontífice es un avance, en términos del discurso que se tiene respecto a la comunidad LGBT dentro de la Iglesia católica, «sin embargo no es suficiente».
«Es una aceptación a medias y la comunidad tampoco deberíamos estar esperando la aceptación de la Iglesia católica, que debería de manejar un discurso de respeto e inclusión a la diversidad y no de aceptación», dijo Montes de Oca.
Para Rubén Maza, de la organización It Gets Better MX en la ciudad de Monterrey, estado de Nuevo León, la declaración de Francisco fue «un tanto moderada o hasta tibia» aunque lo consideró «algo positivo».
«Las personas que formamos parte de la comunidad LGBT tenemos nuestra propias creencias y fe y algunas forman parte de la Iglesia católica y el hecho de que su líder religioso se pronuncie de esta forma es una visión positiva», apuntó.
Para Maza sería importante que el papa «escribiera una carta y la colocara como una cuestión de doctrina o política de la Iglesia y les comunicará a todos los integrantes de la institución su postura».
«Si no lo hace lo único que va a pasar es que se va quedar en buenas intenciones y buenos dichos de un papa que se caracteriza en algunos momentos por ser progresista, pero en otros momentos no», comentó.
En el documental «Francesco» del director Evgeny Afineevsky que se estrenó este día en el Festival de Cine de Roma, el papa Francisco se mostró por primera vez a favor de que pueda haber una ley de uniones civiles para homosexuales.
Montes de Oca destacó que el papa «no lo hace desde la postura de la Iglesia católica sino en una entrevista como parte de un documental (…) y aunque el mensaje es aceptar las uniones, matiza su mensaje diciendo: si pero que no se llame matrimonio».