La Colectiva Salvemos La Pona no ha tenido ya acercamientos con el Municipio de la capital para emprender acciones conjuntas de salvamento de mezquites bicentenarios y otros que fueron plantados y dejados a su suerte en dicho lugar, dijo Sofía González Ponce, representante de esta agrupación civil.
Dijo que después del Festival hecho con el Municipio no se ha hecho ya nada en forma conjunta, pero que ya no hay nada que hablar, sino simplemente que el Municipio se ponga a ejecutar el Plan de Manejo del Área Protegida de La Pona, “eso es lo que se tiene que hacer y por nuestra parte, nosotros ya tenemos una denuncia en la Fiscalía por atentado al equilibrio ecológico, debido a los incendios y tala dentro del Área Natural Protegida y así es como comprobamos que no se está ejecutando el Plan de Manejo, porque implica vigilancia y no está sucediendo. De todas maneras, desde el Consejo de Protección al Ambiente en el Municipio estamos empujando esos temas también, lo tratamos desde varios frentes, pero el asunto es que no hay voluntad política y ahí no hay mucho que hacer”.
Por el momento, la Colectiva está con el amparo que está atorado también porque no se encuentran peritos que puedan determinar los daños ambientales de La Pona y la denuncia en la Fiscalía, pero la principal falla es la voluntad política, destacó.
En rueda de prensa, dijeron los integrantes de esta agrupación que como resultado de las actividades que han implementado en la Colectiva Salvemos La Pona, han podido comprobar que muchos árboles dentro de las 31.4 hectáreas de la mezquitera son talados, otros calcinados y de los plantados como parte del Plan de Manejo del Área Natural Protegida (ANP), apenas ha sobrevivido una quinta parte porque no reciben riego.
“Con ello, damos fe de la ineficiencia del Municipio para llevar a cabo las labores de vigilancia y cuidados ambientales de la ANP. El 26 de marzo del presente año, mientras nos encontrábamos haciendo el habitual recorrido de vigilancia, pudimos constatar que entre 20 y 30 mezquites presentaban cortes limpios, lo que nos hace pensar que fueron hechos con una motosierra. Hecho que es importante porque quien lo hizo contaba con equipo e hizo uso de él sin que nadie interviniera. Además, retiraron la madera que cortaron, y es evidente el uso de un vehículo motorizado entrando con libre acceso al ANP”.
Advirtieron que con cada recorrido que hacen encuentran al menos un espécimen de mezquite maltratado. “El pasado primero de abril encontramos dos mezquites y un eucalipto de aproximadamente doscientos cincuenta años y que sucumbieron ante el fuego. Además, podemos presumir que fueron quemados a propósito, debido a que sólo la parte del tronco cercana al suelo presentaba la quemadura excesiva que los hizo ser derribados completamente”.
Y “este año solicitamos a través de la Plataforma de Transparencia Aguascalientes información referente a cualquier plantación de mezquites que se llevó a cabo en dicho año en la ANP. La respuesta fue que efectivamente se llevó a cabo una plantación de 500 mezquites, de los cuales, a escasos ocho meses de la plantación, pocos sobreviven. Gracias a la información que nos fue proporcionada pudimos identificar cinco áreas cercanas entre sí, en las que se distribuyeron los arbolitos. Es lamentable hacerles saber que al día de hoy dichos arbolitos fueron mal atendidos desde el momento de su trasplante. Encontramos árboles que seguían en sus bolsas de cultivo, es decir, que nunca fueron trasplantados a tierra. Encontramos hoyos para arbolitos en los que simplemente no hay nada y muchos especímenes afectados por los incendios”.
Por otro lado, dijeron que difícilmente llegan a 100 los mezquites sobrevivientes y que en estos cinco espacios se puede pasar a un metro de ellos y resultan desapercibidos, “raquíticos los sobrevivientes, secos muchos más… plantaron y los abandonaron a su suerte. Nótese que los plantaron en agosto y esperaban que las lluvias los mantuvieran vivos, como se establece en el Plan de Manejo”.
Además, es inminente la necesidad de una vigilancia continua en la ANP. El Plan de Manejo de Área Protegida La Pona establece como una prioridad la vigilancia para detener la degradación y destrucción del lugar. A dos años de la expedición de dicho documento, no hay una vigilancia competente y esto ha tenido como consecuencia daños irreparables como la pérdida de mezquites bicentenarios, dijeron.
MAD