México, 1 ene (EFE).- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró en su mensaje de Año Nuevo que el 2019 no fue un mal año y aceptó que su gobierno tiene pendientes como la violencia y la inseguridad en el país, problemas que deberán ir a la baja en 2020.
«El 2019 no fue un mal año, tenemos que decir que avanzamos», declaró el mandatario mediante un video que publicó en redes sociales este martes por la noche, grabado en la zona arqueológica de Palenque, Chiapas.
«Puedo asegurar que se acabó con la corrupción, sobre todo arriba (altos niveles de gobierno), estamos limpiando la corrupción en el gobierno, no hay impunidad, la economía se mantuvo estable, se fortaleció el peso, no hay inflación y aumentaron los salarios mínimos», añadió.
En México, en noviembre la inflación se ubicó en 2,97 %, mientras que la tasa de interés de referencia del Banco de México se ubica actualmente en 7,25 % tras un cuarta baja consecutiva.
En tanto, el tipo de cambio peso-dólar cerró el pasado lunes 30 de diciembre en 18,92 por unidad, mientras que el salario mínimo subirá 20 % a partir del 1 de enero de 2020 y será de 123,22 pesos (unos 6,5 dólares) al día.
El presidente mexicano reconoció que su gobierno, que el pasado 1 de diciembre cumplió un año, de aplicarse más.
«Tenemos problemas pendientes, asignaturas pendientes, como es el caso de la inseguridad y la violencia, pero tengo mucha confianza de que vamos a ir apaciguando, vamos a ir serenando a nuestro país.
Destacó que mediante programas sociales se están atendiendo las causas que originaron la inseguridad y la violencia en el país.
«Tiene que haber progreso y justicia, bienestar para la gente, empleo y se tiene que atender a los jóvenes», dijo.
En el mensaje, López Obrador recordó que su gobierno tiene como objetivo separar a la delincuencia de la autoridad.
«Hay que ‘pintar muy bien la raya’ para que no suceda lo que pasaba en gobiernos anteriores», expuso en referencia a los de los presidentes Felipe Calderón (2006-2012) y Enrique Peña Nieto (2012-2018).
Explicó que tal fue el caso que llegó un tiempo en que, el capo de la droga, (Joaquín) «Guzmán Loera tenía el mismo poder, la misma influencia que tenía el presidente que ostentaba el máximo cargo en el Gobierno de México, porque había un contubernio y eso impedía que se castigaran a los que cometían los delitos».
Para finalizar, López Obrador mandó «un abrazo cariñoso, afectuoso, sincero a todos los mexicanos, independientemente de la corriente de pensamiento a la que se pertenece o a la religión que se profese, tenemos que unirnos todos los mexicanos y les deseo felicidades para el 2020».