México, 16 ago (EFE).- El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, afirmó este domingo que hay «certidumbre» sobre la eficacia de la vacuna contra la COVID-19 de la Universidad de Oxford y AstraZeneca, por lo que podría iniciar una campaña de vacunación el primer trimestre de 2021.
«Se piensa que ya vamos a poder utilizar esta vacuna en el primer trimestre del año próximo con un plan de vacunación nacional, va a ser universal, es decir, al alcance de todos, esto lo va a decidir la Secretaría de Salud», afirmó el mandatario en un mensaje desde Palacio Nacional.
El presidente expresó optimismo tras el anuncio del jueves en el que la Universidad de Oxford, AstraZeneca y la Fundación Carlos Slim, del magnate mexicano del mismo nombre, acordaron que México y Argentina produzcan la vacuna contra la COVID-19 y la distribuyan al resto de Latinoamérica.
El mandatario explicó este domingo que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) podría aprobar en noviembre los resultados de la fase 3 del ensayo clínico de la vacuna, si resultan exitosos.
«Está por concluirse, se está experimentando, se está conociendo su eficacia y ya se tiene certidumbre, ya hay amplias probabilidades de que esta vacuna sea eficaz para enfrentar al COVID-19», afirmó.
La vacuna AZD1222 es una de las más avanzadas, aunque México también tiene contacto con otros 15 laboratorios y participará en la fase 3 del ensayo clínico de la francesa Sanofi-Pasteur, la estadounidense Janssen, y las chinas Cansino Biologics y Walvax Biotechnology.
Sin embargo, la Fundación Carlos Slim propuso apoyo para acelerar la producción de entre 150 millones y 250 millones de dosis de la vacuna de Oxford para toda Latinoamérica, una cifra que podría crecer hasta los 400 millones con apoyo de otros países de la región, según AstraZeneca.
Pero López Obrador aclaró que «no tiene propósitos de lucro», por lo que cada dosis costará cuatro dólares solo para cubrir los insumos.
«No los va a pagar la gente de manera directa, aquí en México, lo va a financiar el Gobierno con el presupuesto público, que es dinero del pueblo, pero la vacuna se va a aplicar de manera gratuita a todos los mexicanos», aseveró el presidente.
Tras cinco meses y medio de la llegada de la enfermad, México acumula más de 517.000 casos y cerca de 56.500 muertos.
Aunque el mandatario reconoció que la pandemia «sigue causando daño, tristeza y dolor», argumentó que la vacuna es una «muy buena noticia».
«Es una esperanza, es tener certidumbre, es tener confianza de que vamos a salir, que se va a terminar esta pesadilla y que se va a lograr la salud pública», concluyó.