Acapulco (México), 13 mar (EFE).- Mientras este viernes el peso mexicano alcanzaba su mínimo histórico por la crisis mundial desatada a raíz del coronavirus, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseveró triunfalista que hay «condiciones inmejorables» para el crecimiento de la economía mexicana.
«Hay condiciones inmejorables para crecer a pesar de las circunstancias. No puedo hablar de qué circunstancias porque nosotros hemos decidido que en el tema del coronavirus hablen los médicos y los científicos, no los políticos», expresó en la clausura de la 83 Convención Bancaria de Acapulco, playa del sur del país.
El mandatario sostuvo que su Gobierno mantiene «finanzas públicas sanas» al reafirmar su compromiso con la autonomía del Banco de México (Banxico) y prometer que «suceda lo que suceda» el país no aumentará este año su deuda pública.
Además, celebró que el Parlamento canadiense ratificó este viernes el nuevo Tratado comercial de México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
«Hay una tendencia de aislamiento en algunos países del mundo, pero nosotros nos estamos integrando con el mercado más importante del planeta», subrayó.
Sin embargo, no hizo ninguna referencia a que el peso mexicano registró este viernes un nuevo mínimo histórico frente al dólar estadounidense, en plena crisis por el coronavirus, al cotizarse en 21,98 unidades a la venta al cierre del mercado interbancario, un nivel superior al récord previo, los 21,93 pesos de enero de 2017.
Además, la calificadora Moody’s advirtió en un informe de este viernes que la economía mexicana caerá en recesión, si la pandemia de coronavirus empeora.
Esto se suma a la contracción de 0,1 % que registró el PIB mexicano en 2019, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
PANDEMIA SIN EXAGERAR
Con 16 casos de COVID-19 registrados hasta el último conteo oficial del Gobierno federal, México no ha tomado medidas severas como la cancelación de vuelos o suspensión de eventos masivos, como se ha decretado otros países latinoamericanos y en Estados Unidos.
«Que sean los médicos y los científicos los que nos informen para que no se exagere y se disminuyan los efectos de esta epidemia», reiteró López Obrador.
En la misma convención, el secretario de Hacienda y Crédito Público, Arturo Herrera, explicó que se está coordinando con la Secretaría de Salud para que no haya «desabastecimiento» de medicinas para hacer frente a la pandemia.
Y aseveró que México tiene reservas de capital suficientes para pasar el 2020 con independencia de «lo que pase con los mercados externos».
BANQUEROS SE PREPARAN
Este jueves y viernes se celebró en Acapulco la 83 reunión anual de la Asociación de Bancos de México (ABM), cuyo programa estaba centrado en la digitalización del sistema financiero con el lema «Prosperidad para todos en la era digital», pero los efectos económicos del coronavirus centraron todas las conversaciones.
De hecho, el presidente del Consejo de Administración de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), Jaime Ruiz Sacristán, dio positivo este viernes a la prueba del COVID-19, aunque hasta el momento no presenta ningún síntoma.
El presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), Juan Pablo Graf, pidió a los bancos que se preparen para enviar a su personal a trabajar desde casa.
En tanto, el gobernador de Banxico, Alejandro Díaz de León, admitió que la crisis afectará a la política monetaria que el banco central determinará dentro de dos semanas.
El presidente de la ABM, Luis Niño de Rivera, anfitrión del encuentro, proclamó que la banca mexicana está «preparada» para enfrentar los efectos del coronavirus al señalar que en cualquier crisis se abren «oportunidades».
«Si China no puede enviar mercancía por su inactividad económica, eso nos da, como proveedor del mercado más grande del mundo, que es Estados Unidos y Canadá, la posibilidad de exportar productos que hasta ahora llegaban de otros países», sostuvo.
Fundada en 1928, la Asociación de Bancos de México cuenta actualmente con 51 instituciones de banca múltiple asociadas, con el propósito de representar los intereses generales del sector.