CIUDAD DE MÉXICO., marzo 22 (EL UNIVERSAL).- Rebecca Jones se definió por ser una mujer de carácter fuerte e independiente, discreta en su vida privada y por lo mismo poco se sabe de ella, a menos que fuera la misma actriz quien compartiera algunos aspectos, pero sin duda hubo dos figuras que formaron parte de su vida, cuya relación fue difícil mantener fuera de los reflectores, se trata de Humberto Zurita y Alejandro Camacho, quienes fueron pareja de Jones.
Rebecca estaba recién egresada de Centro de Capacitación de Actores, la escuela de actuación de Televisa, cuando surgió su primera oportunidad, participar en la telenovela «Muchacha de barrio» (1979), la cual era protagonizada por Ana Martin y Humberto Zurita, ahí se dio su primer encuentro, pero cuatro años después volvieron a coincidir en el melodrama «El maleficio», es entonces cuando comienzan un romance pero fuera de los foros.
Aunque la relación pintaba para algo más serio la ruptura vino en uno de los momentos más complicados para Jones, cuando recibió la noticia que su hermano Mark había fallecido en un accidente en el mar, tenía tan sólo 22 años, motivo por el cual tuvo que viajar a California para despedirlo y después regresar a México, a cumplir con sus compromisos de trabajo.
Pero la protagonista de telenovelas como «Cuna de Lobos» y «Para Volver Amar», contó a Gustavo Adolfo Infante en su programa «El minuto que cambió mi destino», que comenzó una relación con Alejandro Camacho cuando aún no terminaba su noviazgo con Zurita.
Cuando Rebecca se encontró con quien sería su esposo y padre de su hijo Maximiliano, Alejandro Camacho, aún ella estaba en una relación con Humberto Zurita y él con Alma Muriel, así que las cosas no pasaron a más; incluso el actor aseguró que le cayó un poco mal porque tenía un carácter complicado.
«Nunca se la baje, jamás me he metido con las chavas de mis cuates, ya si tronaste pues bueno», dijo Camacho en una entrevista con Adela Micha. Pero Rebecca siendo una mujer liberal y dueña de su destino, fue quien dio el primer paso al decirle al actor que «quería todo con él», así que iniciaron una relación de pareja que los llevó primero a vivir juntos, después a casarse por la vía civil y en 1986, mientras formaban parte de la telenovela «Cuna de Lobos», decidieron hacerlo por la vía religiosa, en una visita que hicieron a la familia de la actriz en los Estados Unidos, por lo cual tuvieron seis días de licencia en las grabaciones.
Un largo matrimonio y volvió a la soltería
Su matrimonio duró 26 años, del que nació su único hijo Maximiliano, quien fue el mayor orgullo de su madre. Pero en 2011 los actores sorprendieron con la noticia de su separación, Alejandro comentó en su momento que su amor se transformó en amistad, pero ella fue más tajante, en una entrevista para el programa «Montse & Joe», donde aseguró que dejó de ser feliz y por eso decidió divorciarse.
En la misma entrevista con Adela Micha, Alejandro Camacho aseguró que llevaban una buena relación, donde la cordialidad era primordial, aunque en agosto del año pasado hubo una fricción entre ellos, porque el actor había asegurado que el cáncer de ovario, que Rebecca había vencido en 2017, había regresado, a lo que ella aseguró molesta que no era así, pero que la gente estaba en la libertad de creerle a ella o a alguien que si bien es el padre de su hijo, no vive más con ella y no sabe qué pasa en su vida.
Desde su divorcio Rebecca Jones decidió no tener pareja y se dedicó a disfrutar de la vida, además de trabajar en televisión y teatro, sus últimos trabajo fueron la telenovela «Cabo» y la obra de teatro «Una mujer extraordinaria atrapada en una vida ordinaria», que el productor Rubén Lara planeaba retomar con ella este año.