México.- El coronavirus está dominando las noticias de este principio de año. Ya son más de 300 las muertes confirmadas a causa de esta enfermedad, una infección rara que se registró por primera vez en la ciudad china de Wuhan y cuya transmisión entre personas ha ido acelerando desde mitad del mes de enero. Sus síntomas son a menudo similares a los de un resfriado común y eso, unido a la alta tasa de mortalidad, ha causado el pánico entre la sociedad.
Esta incertidumbre ha llegado a todos los sectores. Los organizadores del MWC Barcelona se preguntan si el coronavirus llegará a afectar el desarrollo de su evento, una de las citas tecnológicas anuales por excelencia. También ha tenido un efecto directo en el mercado de valores. Están siendo especialmente perjudicadas las empresas con cualquier vinculación a China: desde aerolíneas a siderúrgicas, pasando por plataformas digitales y otras que operan en el sector turístico.
El miedo provocado por el coronavirus también ha hecho mella en los mercados bursátiles de América Latina. Los inversores todavía recuerdan el impacto que tuvo el SARS, otro coronavirus que causó la muerte de 800 personas en 2020 y costó unos 33.000 millones de dólares a la economía mundial. China, además de ser la segunda economía más importante del mundo, es también uno de los principales importadores de bienes latinoamericanos. Esto significa que, si la economía china pierde fuerza, también lo hará en consecuencia el mercado de Latinoamérica.
El viernes 31 de enero, las bolsas de América Latina registraron una caída que puede asociarse precisamente a los temores que ha traído el coronavirus en la economía mundial, un impacto que podría ser todavía peor que los anteriores.
En Brasil, el real retrocedió un 0,63 %, una cifra que se suma a la perdida de un 6,8 % registrada en todo enero, la peor caída mensual en diez años. Por otro lado, el peso argentino y el peso chileno se depreciaron un 0,72 % y un 0,55 % respectivamente en un solo día, y en Perú, el Sol ya ha sufrido una depreciación del 2,23 % desde principios de año. Son números similares a los de Colombia, cuya moneda ha retrocedido un 2,3 % durante el primer mes de 2020.
En México, el comportamiento del mercado bursátil también sigue muy ligado a la evolución del coronavirus y el pasado 31 de enero también registró una caída importante, en este caso del 1,68 % según el Índice de Precios y Cotizaciones de la Bolsa (que integra las acciones de las 35 compañías más importantes del país). Todos los sectores registraron pérdidas, especialmente el de materiales (-1,79 %), el de consumo frecuente (-1,22 %), el industrial (-0,84 %) y el financiero (0,31 %). El Grupo Financiero Inbursa y Orbia Advance Corporation fueron de los más afectados.
En un solo día, el peso mexicano presentó una pequeña depreciación respecto al dólar estadounidense y pasó a cotizar 18,8804 pesos por dólar en vez de 18,7726 pesos (0,57 % menos respecto al jueves 30 de enero) o 18,6915 (0,43 % menos respecto al miércoles 29). Todo apunta a que esta volatilidad del peso y el dólar continuará en el futuro más próximo, o como mínimo mientras el coronavirus siga provocando la misma incertidumbre que hasta ahora.
Se considera que la economía china podría caer un 5 % o más debido al coronavirus, y eso se explica por varios motivos. No ha ayudado que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara hace unos días estado de emergencia global, algo que solo ha hecho que traer más incertidumbre dentro y fuera de México. Además, China ha suspendido cualquier actividad laboral, incluida la industrial, en 14 de sus provincias, que suponen el 70 % de su producción total.
La economía china ha empezado ya a desacelerarse y, siendo la potencia económica global que es, era inevitable que en un momento u otro esto tuviera un impacto también fuera del país asiático. En América Latina ya se están viendo las primeras consecuencias y cabe esperar que los mercados bursátiles de la zona sigan reaccionando a los temores que ha traído el coronavirus.