Después de un poco más de una década sin operaciones resurge de entre las cenizas la delegación de CANACINTRA en Aguascalientes, bajo la dirigencia de Érika Muñoz Vidrio, convirtiéndose en la primera mujer en presidir dicho organismo en el Estado.
Ayer la gobernadora Tere Jiménez Esquivel le tomó protesta a la nueva titular de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (CANACINTRA) en Aguascalientes, reiterando el apoyo por parte del Gobierno del Estado para lograr el impulso a la industria y el desarrollo económico en la región.
En el recuento de los daños la Cámara de la Transformación sufrió un tremendo bache hace casi diez años, cuando fueron desviados recursos por parte del ex-gerente general de la CANACINTRA en aquel momento, provocando que dicho organismo empresarial heredara un cuantioso adeudo y tuviera que atravesar situaciones adversas.
Las instalaciones ubicadas en una finca antigua de la calle Colón en el Barrio del Encino fueron embargadas como garantía del pago y continúan vigentes los juicios que habrán de desahogarse de acuerdo al tiempo propio que sigue la dinámica de trabajo en los juzgados.
Ante la situación que ha vivido la CANACINTRA estatal, desde ese entonces hasta ahora solamente ha existido un encargado de despacho, quien a decir de quienes lo han seguido, continúa realizando trabajo de vinculación de afiliados (si es que aún existen), representatividad, alianzas con gobiernos, universidades y centros de investigación.
A raíz de los problemas de la defraudación, la presidencia nacional de la CANACINTRA decidió intervenir la delegación local y bajo la figura de un encargado de despacho en Aguascalientes.
La empresaria Érika Muñoz Vidrio tendrá que llegar a realizar una purga del organismo aquí en Aguascalientes y realizar un duro trabajo para la limpieza del oscuro pasado que lo persigue.