Río de Janeiro, 26 dic (EFE).-
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, desembarcó este martes en la Restinga de Marambaia, una base de la Marina de Guerra en el litoral del estado de Río de Janeiro con paradisíacas playas de uso exclusivo para los militares, donde pretende pasar una semana de descanso.
La estadía de Lula, su esposa, Rosángela ‘Janja’ da Silva, y algunos familiares en la exclusiva base naval coincidirá con la celebración del primer año de Gobierno de su tercer mandato, que asumió el 1 de enero de 2023.
Pese a que la decisión del líder progresista de pasar las festividades de año nuevo en una playa a unos 80 kilómetros de la ciudad de Río de Janeiro no fue anunciada ni comentada por la Presidencia, su llegada a la base naval fue informada por la estatal Agencia Brasil.
La agencia oficial de noticias de Brasil informó igualmente que la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia también confirmó la estadía de Lula en la Restinga de Marambaia hasta el 3 de enero, cuando volverá a trabajar en el Palacio de Planalto, en Brasilia.
La información sobre el viaje, sin embargo, fue anticipada el pasado viernes por la primera dama, quien, en declaraciones a los periodistas, afirmó que, tras un año de mucho trabajo para «comenzar a reconstruir el país», el presidente pretendía descansar algunos días.
«Confieso que ambos estamos muy cansados y que vamos a descansar un poco antes del evento del 8 de enero», afirmó Janja da Silva en referencia a la ceremonia prevista para conmemorar el primer aniversario del día en que miles de radicales de ultraderecha invadieron las sedes de la Presidencia, el Congreso y la Corte Suprema para intentar forzar un golpe de Estado contra Lula.
La base militar escogida para el descanso del mandatario, en la que también tienen instalaciones el Ejército y la Fuerza Aérea, cuenta con 42 kilómetros de playas con acceso restringido y está cercada por bosques aún preservados de la llamada Mata (Bosque) Atlántica.
La Restinga de Marambaia, en la que Lula también pasó una temporada de descanso en 2006, en el último año de su primer mandato (2003-2006), ha alojado también a otros jefes de Estado, entre ellos, Fernando Henrique Cardoso, Michel Temer y Jair Bolsonaro.
Lula, que pasó las festividades de navidad con su familia en el Palacio de la Alvorada, la residencia oficial de la Presidencia, también disfrutó de algunos días de descanso este año, tanto en el Carnaval como en el festivo de Corpus Christi, en otra base naval, la de Aratu, ubicada en el estado de Bahía (nordeste).