CIUDAD DE MÉXICO, noviembre 13 (EL UNIVERSAL).-
En abril de este año el mundo del espectáculo quedó conmocionado luego de que se registrara la repentina muerte de Julián Figueroa, actor y cantante, único hijo de Maribel Guardia.
El joven, de 27 años, fue encontrado sin vida en la casa que compartía con su madre y aunque, al principio no se dieron detalles sobre las causas del deceso, los informes forenses indicaron que Julián habría sufrido un paro cardiaco fulminante.
Han pasado siete meses desde ese trágico suceso, pero Maribel no ha dejado de recordarlo un solo día. Incluso, en una reciente entrevista que dio al canal de YouTube de Matilde Obregón, contó algunos detalles sobre su hijo, quien aseguró que a pesar de que él era una persona muy espiritual, le tenía mucho miedo a la muerte.
La costarricense relató que en varias ocasiones, Julián le expresó su angustia de tan solo pensar en el día que partiría de este mundo:
«Siempre le tuvo mucho miedo a la muerte, le tenía pavor y me decía: ‘mamá, tengo mucho miedo de morirme’ yo le respondía: ‘papito, pero ¿por qué piensas en la muerte’ y él me decía: ‘¿no te da miedo la muerte?'», contó.
Aunque no es nada fuera de lo común que los seres humanos sientan temor por su muerte, la presentadora atribuye la angustia de su hijo a los trágicos incidentes que sufrió la familia Figueroa; recordemos que dos de los hermanos de Julián (Trigo y Juan Figueroa) fueron asesinados, mientras que su padre, el cantante Joan Sebastian, falleció tras una larga lucha contra el cáncer.
«Lo afectó el cáncer del papá y la muerte de sus hermanos; (Julián) los admiraba, eran muchachos grandotes, guapos, entrones. Lo afectó mucho y creo que por eso tuvo problemas con el alcohol», agregó.
De igual forma, Maribel Guardia reveló que Julián llegó a pedirle que, si algún día faltaba, se hiciera cargo de José Julián, su nieto, un deseo que ahora está cumpliendo.
Entre otros temas, Maribel también recordó cómo fue que se enteró de la muerte de su hijo, pues ese mismo día ella se encontraba en el teatro dando función de la obra «Lagunilla mi barrio».
Aunque la obra transcurrió con normalidad, para la actriz había algo diferente, quizás un presentimiento que le avisaba de la tragedia que la aguardaba en su casa y de la que solo se habían enterado su esposo, Marco Chacón, y su nuera, Imelda Garza: «Sentía que algo estaba mal. Le hablo a Marco y me dice que ya vaya para la casa y cuando vamos a la mitad (del camino) le vuelvo a marcar y me dice: ‘Julián está muerto’. Yo agarré el teléfono, lo tiré contra el vidrio, empecé a gritar como loca, de milagro no me estrellé. Fue lo más triste, lo más doloroso que me ha pasado en mi vida», expresó.
Lo que pasó después fue igual de horrible, la actriz llegó hasta la habitación que era de su hijo y lo encontró «dormido», ya sin vida: «Murió dormido; estaba con sus ojitos cerrados, tranquilo, con su piernita cruzada. Le agarraba las manos, se las besaba; le besaba sus pies, porque siempre le besaba los pies, desde chiquito». finalizó.
Este trago tan amargo ha cambiado la vida de Maribel para siempre, ahora dedica su tiempo a procurar a su nieto y vive un día a la vez, tratando de superar su pérdida.