JUCHITÁN, Oax., marzo 1 (EL UNIVERSAL).-
Al cumplirse tres días desde que pobladores indígenas de Mogoñé Viejo suspendieron la modernización de las obras del Tren Transístmico, la mañana de este miércoles más de 20 elementos de la Secretaría de Marina (Semar), a bordo de cinco patrullas y al mando del capitán, Jorge Mario Bremon Zamorano, intentaron desalojarlos.
En respuesta a este nuevo intento de desalojo por parte de los marinos, decenas de campesinos, hombres y mujeres, procedentes de cinco localidades mixes o ayuujk, como Hierba Santa, Río Pachiñé, Encinal Colorado, El Zarzal y Palomares, arribaron al sitio de la protesta y se solidarizaron con sus paisanos de Mogoñé Viejo.
Mediante un comunicado, la Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (Ucizoni), llamó al gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz (Morena), a establecer una mesa de diálogo para atender con seriedad las demandas de los núcleos agrarios afectados en sus parcelas con los trabajos de ampliación de las vías del Tren Transístmico.
Ante el riesgo de enfrentamiento entre los marinos y los ejidatarios de Mogoñé Viejo y Vixidu, la mesa de diálogo es necesaria sobre todo porque la Ucizoni está en desacuerdo con las opiniones expresadas por el secretario de gobierno, Jesús Romero López, quien afirmó a EL UNIVERSAL que 90% de las demandas campesinas han sido atendidas.
Desde la responsabilidad de la modernización de la red férrea del tren que corre de Salina Cruz, Oaxaca, a Coatzacoalcos, Veracruz, pasó de la administración del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT) y fue transferido a la Semae, las organizaciones advirtieron que se cancelaba la vía civil del diálogo.
La modernización del tren que une el Pacífico con el Atlántico, y que llevará pasajeros y carga contenerizada de puerto a puerto, forma parte del Plan de Desarrollo del Istmo de Tehuantepec (PDIT) 2018-2024 y es una de las acciones que ejecuta el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), que debe estar terminado en diciembre de este año.
