México, 7 ago (EFE).- El Gobierno de México realizó este miércoles la colocación de bonos a tasa de interés real fija a 30 años en el mercado de deuda local por un monto total de 3.000 millones de unidades de inversión (udis), equivalentes a 956 millones de dólares.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) indicó en un boletín que el nuevo bono de referencia con vencimiento en noviembre de 2050 pagará un cupón de 4 % y ofrecerá a los inversionistas un rendimiento de 3,71 %.
Se contó con una demanda total de más de 5.319 millones de udis (1.685 millones de dólares), correspondiente a 1,8 veces el monto colocado, señaló la SHCP.
La transacción contó con una participación cercana a 40 inversionistas nacionales y extranjeros. La participación de bancos y casas de bolsa fue de 39 %, la de fondos de inversión de 9 %, la de fondos de pensión y aseguradoras de 49 % y la de tesorerías gubernamentales y otros participantes de 3 %.
La dependencia señaló que esta operación se enmarca dentro de la estrategia delineada en el Plan Anual de Financiamiento 2019, «que busca contribuir al buen funcionamiento del mercado de deuda local, así como fortalecer las referencias del mercado para los distintos participantes y obtener condiciones favorables de financiamiento para el Gobierno de México».
Precisó que la colocación se realizó a través de los Formadores de Mercado de Udibonos (Bonos de Desarrollo del Gobierno federal denominados en Udis) mediante una subasta sindicada, método que permite colocar un monto relevante entre los inversionistas para que las nuevas emisiones cuenten con mayor liquidez y sean elegibles en los distintos índices globales de renta fija.
Adicionalmente, la subasta sindicada contribuye al proceso de formación de precios y promueve una adecuada distribución de los instrumentos colocados, enfatizó.
De acuerdo con la SHCP, la colocación se llevó a cabo bajo condiciones favorables para el Gobierno federal, pese a la elevada volatilidad que persiste en los mercados financieros internacionales y de la incertidumbre asociada al comportamiento de la economía mundial.
«Lo anterior pone de manifiesto la confianza que mantienen los inversionistas nacionales y extranjeros en los fundamentos económicos de nuestro país», puntualizó.