México, 25 oct (EFE).- El Gobierno de México sostuvo este viernes que la Cámara de Representantes estadounidense iniciará en «las próximas semanas» el proceso de ratificación del nuevo tratado de libre comercio entre México, Estados Unidos y Canadá, conocido como T-MEC.
«Tengo confianza de que, antes del receso de invierno, el Congreso de Estados Unidos lance el punto clave y (la presidenta de la Cámara Baja, Nancy Pelosi) decida llevar eso a votación», señaló en rueda de prensa el subsecretario mexicano para América del Norte, Jesús Seade, negociador del T-MEC.
Desde Palacio Nacional, Seade explicó que Pelosi debe llevar el tratado comercial ante el Comité de Medios y Procedimientos de la Cámara Baja antes de que se apruebe en el pleno, para posteriormente ir al Comité de Finanzas del Senado y que la Cámara Alta lo ratifique definitivamente.
«El punto de interés es saber cuándo va a suceder. Tengo confianza que se dará en las próximas semanas», relató Seade, quien recordó que el T-MEC entrará en vigor en un plazo de tres meses desde que los tres países hayan notificado la ratificación del acuerdo.
El subsecretario de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) dio por descontado que no habrá ningún problema para que Canadá también ratifique el tratado comercial, luego de las elecciones del pasado lunes en las que se impuso el Partido Liberal de Justin Trudeau, cuyo Gobierno negoció el T-MEC.
El Senado mexicano ratificó el pasado 19 de junio el T-MEC con 114 votos a favor, 5 en contra y 3 abstenciones, siendo el único de los tres países del tratado que ha cumplido el trámite hasta la fecha.
Seade expuso la estrategia de «cabildeo» llevada a cabo por el Gobierno de México para persuadir a congresistas, empresarios, sindicalistas y medios de comunicación estadounidenses para que den el empujón final al T-MEC.
«Hemos estado contactando en repetidas veces a los principales actores públicos y privados contando la importancia del libre comercio con México y el valor del T-MEC», expresó el subsecretario mexicano.
Seade explicó que entre las filas demócratas había inquietudes por la legislación laboral de México, pero la aprobación de una reforma laboral en el país y una carta que mandó el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, a los legisladores pudieron «disipar las dudas».
Preguntado por la prensa, el funcionario descartó que la situación de violencia que sufre México, agravada por la fallida captura de Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín «el Chapo» Guzmán, haya «incidido» en las negociaciones del tratado.
«Por supuesto es un tema que preocupa en Estados Unidos como nos preocupa en México. Se han hecho comentarios pero no los he sentido muy específicamente presentes en el tema del T-MEC», explicó.
Asimismo, explicó que el tratado no contiene capítulos sobre la crisis climática debido a la oposición del presidente estadounidense, Donald Trump, pero recordó que el T-MEC debe revisarse cada seis años, lo que supone una oportunidad para incluir en un futuro este tema «importante».
«Es muy importante lo de la aprobación del tratado y reitero que va a ayudar, será algo bueno para canadá, Estados Unidos y México. Se trata de fortalecer la integración económica entre los tres países», concluyó López Obrador.
Tras más de un año de negociaciones, los Gobiernos de México, Estados Unidos y Canadá concluyeron el 30 de noviembre de 2018 la negociación del T-MEC, que debe sustituir el actual Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que entró en vigor en 1994.
La Casa Blanca quiere que haya una votación en el Congreso antes de que acabe este año pero la Cámara de Representantes está controlada por la oposición demócrata, donde Pelosi ha mostrado reservas en lo relativo a derechos laborales y salarios y asuntos medioambientales o relacionados con las grandes farmacéuticas.