Tapachula (México), 19 sep (EFE).- Migrantes africanos que están varados en el suroriental estado mexicano de Chiapas, fronterizo con Guatemala, cumplieron este jueves un mes y tres días de protestas sin que las autoridades mexicanas les expidan algún documento que les permita transitar por territorio nacional.
Las protestas, la mayoría pacíficas, recobraron fuerza esta semana, cuando los migrantes se enfrentaron con agentes de la Guardia Nacional y de la Policía Federal en el acceso principal de la estación migratoria Siglo XXI en la ciudad de Tapachula.
Pablo, vocero del grupo de migrantes africanos, informó a medios que mantendrán sus actos de protesta hasta que las autoridades mexicanas les otorguen los oficios de salida para poder dejar Tapachula, a unos 40 kilómetros de la frontera con Guatemala.
De igual forma, realizan danzas tradicionales de sus países.
Los migrantes, originarios de al menos 10 países africanos, principalmente Camerún y República Democrática del Congo, bloquearon de nuevo este jueves el acceso principal de la estación Siglo XXI para evitar el ingreso de vehículos que trasladan a migrantes provenientes del interior del país.
Tampoco permitirán la instalación de ambulancias de la Secretaría de Salud o de alguna organización, en protesta por los rumores que han circulado en el sentido de que los extranjeros tienen ébola, dijo Pablo, y destacó que es lamentable que se manipule a la opinión pública con la amenaza de una enfermedad letal.
Los africanos también expresaron que, a través del activista y abogado Luis García Villagrán, han tramitado amparos ante tribunales federales con sede en Tapachula para cerca de mil migrantes, que les permiten dejar la estación Siglo XXI, del Instituto Nacional de Migración (INM).
No obstante, el INM no les ha otorgado un salvoconducto para transitar por el país.
Paralelamente, Villagrán ha solicitado a las autoridades migratorias que regularicen la situación de los africanos.
El INM informó este miércoles que ha brindado atención en 11 días a 393 personas extranjeras en el módulo instalado a las afueras de la estación Siglo XXI, sin especificar qué servicios ha ofrecido.
Desde principios de año más de 3.500 migrantes africanos se han registrado ante el INM y a partir de agosto instalaron tiendas de campaña en el exterior de la estación Siglo XXI, y han protagonizado protestas en la ciudad.
La migración aumentó en México desde octubre de 2018, cuando caravanas con miles de migrantes, en su mayoría centroamericanos, comenzaron a ingresar al país para llegar a Estados Unidos.
A inicios de junio, Estados Unidos y México llegaron a un acuerdo migratorio que evitó que el primer país impusiera aranceles a todos los productos provenientes del segundo.
A raíz de ello, México envió a las fronteras norte y sur a la Guardia Nacional -un nuevo cuerpo de seguridad impulsado por el Ejecutivo- y se contrató a más personal migratorio.