Miles de israelíes protestaron esta noche, como cada sábado, en Tel Aviv para exigir al primer ministro, Benjamín Netanyahu, que firme de inmediato el acuerdo de alto el fuego en la Franja de Gaza, que permita el retorno de todos los rehenes, antes de su viaje a EEUU, a donde tiene previsto partir la noche del domingo.
«Netanyahu, firma el acuerdo antes de volar a DC» se leía en pancartas y coreaban los manifestantes, que aglutinan a familiares y seres queridos de los rehenes y una amplia amalgama de grupos civiles antigubernamentales, que exigen la dimisión del primer ministro.
Israel y Hamás llevaron a cabo negociaciones indirectas hace un par de semanas en Doha y El Cairo, con señales positivas de que un acuerdo estaba cerca, pero a última hora Netanyahu añadió exigencias que bloquearon las conversaciones, como el control israelí del corredor Filadelfia -la frontera de la Franja con Egipto- y el cruce de Rafah.
«Al menos 20 rehenes capturados vivos han muerto durante 288 días en Gaza. Y cada día que pasa los rehenes mueren, enferman y sufren severas torturas», lamentó Yizhar Lifshitz, cuyos padres Yocheved Lifshitz -liberada en octubre- y Oded Lifshitz, aún cautivo, fueron secuestrados el 7 de octubre.
Nadav Rudaeff, hijo de Lior Rudaeff, asesinado por Hamás el 7 de octubre y cuyo cuerpo está retenido en Gaza, también exigió un acuerdo para poder enterrar a su padre, que ayer habría cumplido 62 años.
«Estoy enojado porque no tenemos un lugar donde llorar por ti. ¿Por qué alguien piensa que es lógico que tenga que suplicar que tengas una tumba? ¿Qué diablos tenemos que hacer, sentarnos en el balcón con vistas a Jan Yunis y Rafah y rezar por ti?», se preguntó.
En la protesta también participó el exembajador de EEUU en Israel Thomas Nides, quien pidió a Netanyahu que diga públicamente ante el Congreso que apoya la propuesta de acuerdo planteada por el presidente Joe Biden en mayo, base sobre la que negocian las partes desde entonces y que contempla una tregua en varias fases que culminaría con el cese definitivo de las hostilidades.
«Dígales lo importante que es esto para nuestro país, para su país, para las familias que están sentadas aquí hoy, para las madres, los padres, las hermanas y los hermanos. Dígales que deben traerlos a casa ahora», pidió.
Netanyahu ha sido invitado a pronunciar un discurso en una sesión conjunta de las dos cámaras del Congreso de EEUU el miércoles 24 de julio y tiene previsto reunirse con Biden, aunque no se ha concretado la fecha. Según la prensa israelí, también pretende verse con el candidato republicano Donald Trump.
Filtraciones a medios israelíes también apuntan a que varios rehenes liberados y familiares viajarán a Washington con Netanyahu, entre ellos la rehén rescatada en junio en Nuseirat, Noa Argamani, o familiares de los Bibas -padre, madre y dos niños cautivos y sin saber de su estado o paradero hace meses-.
Hasta ahora las partes solo han firmado un acuerdo de tregua de una semana en noviembre, que permitió el intercambio de 105 rehenes israelíes por 240 presos palestinos. Además, cuatro rehenes fueron liberadas por Hamás en octubre y siete han sido rescatados por el Ejército, que además ha capturado una veintena de cadáveres de cautivos.
De los 251 secuestrados el 7 de octubre, quedan dentro de la Franja 116, pero 42 están confirmados muertos por la inteligencia israelí, aunque Hamás eleva la cifra a más de 70.