Los jugadores del Real Madrid recibieron un multitudinario recibimiento en su llegada al estadio Santiago Bernabéu para la disputa del clásico frente al FC Barcelona de este domingo, llevados por la euforia de la reciente clasificación a las semifinales de la Liga de Campeones tras eliminar al Manchester City el pasado miércoles.
Además de tratarse de un encuentro especial por jugar frente al máximo rival, también podría suponer, en caso de victoria o empate de los de Carlo Ancelotti, un golpe definitivo a LaLiga, por los ocho puntos de ventaja que tienen sobre el conjunto azulgrana. Y después de este domingo solo quedarán 18 en juego.
Un recibimiento al autobús bajo el calor en Madrid que provocó que los servicios médicos tuvieran que atender a varias personas por golpes de calor; eso sí, sin mayores consecuencias.
Con bengalas y cánticos de apoyo llegó la expedición madridista al Santiago Bernabéu una hora y media antes de que dé comienzo el encuentro (21:00 horas CEST, -2 GMT).
Por su parte, el Barcelona llegó siete minutos antes ante los pitos e insultos de la afición del conjunto blanco.