Los comerciantes locales y prestadores de servicios tienen puestas sus esperanzas de sobrevivencia en la temporada decembrina, aunque el repunte en ventas no será tan significativo como en otros años, esperan que diciembre les deje un buen sabor de boca.
El último mes del año será un aliciente, por lo que se espera que una vez que comience a fluir el pago de aguinaldos y fondos de ahorro, se dinamice un poco la economía, señaló la CANACO.
Sin embargo se vivirá una temporada decembrina sin precedente histórico alguno, esta vez la derrama económica será muy inferior a la del año pasado, pero no pierden la esperanza en tener al menos un ligero respiro.
La temporada será la última oportunidad del año para salvar a miles de comercios que actualmente se encuentran en la cuerda floja, cuya situación empeoró luego del último decreto de cierre de establecimientos, que venció ayer.
El presidente de la CANACO, Humberto Martínez Guerra, dijo que sin duda se vivirá una temporada navideña sin precedente alguno, por lo que las expectativas de incremento en ventas esta vez serán muy conservadoras.
Sin duda diciembre es la mejor temporada del año en términos económicos, pero este año el panorama es totalmente distinto, la crisis económica es muy complicada para todos y por ende los gastos serán muy cautelosos.
“Por lo tanto esta Navidad será muy cautelosa en cuanto a reuniones familiares para no volver a tener picos en la pandemia”, manifestó el dirigente de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios (CANACO).