En caso de llevarse a cabo el partido de futbol pactado para el próximo viernes entre el Necaxa y Querétaro, será a puerta cerrada. “Es lo mínimo que podemos hacer en solidaridad con los que en estos momentos se encuentran hospitalizados, no podemos hablar de que se lleve en condiciones normales hasta que se esclarezcan las cosas y hasta que la Federación tenga una postura firme”, declaró el alcalde Leonardo Montañez Castro, y añadió que la decisión es determinante hasta que no se tenga más información.
El alcalde capitalino reconoció que los acontecimientos registrados “son hechos lamentables para el país, para el futbol mexicano y para las familias, ya que eso no es lo que queremos inculcar a nuestros jóvenes y niños”; por lo tanto, en solidaridad con los afectados es lo mínimo que se puede hacer.
Insistió que hasta que “no tengamos una información más completa, se supone que se están esclareciendo los hechos, pero hasta en tanto no haya una postura firme de la Federación y hasta en tanto no tengamos mayor información sobre lo que sucedió, no podemos hablar de que el próximo partido se pueda llevar en condiciones normales hasta que no se esclarezca la situación y, en caso de llevarse a cabo, tendrá que ser a puerta cerrada”.
Destacó que es una decisión que como Municipio, en conjunto con las demás empresas involucradas, deberán de revisar, pero en lo que respecta al control de los espectáculos es una competencia municipal, por lo tanto, “hasta que no haya más información y no tengamos de la Federación una postura en donde todos quedemos convencidos, no podemos hablar de que se pueda llevar un partido en condiciones normales”.
Por otra parte, aseguró que se intensificarán los operativos de seguridad, recordó que la competencia de la Policía Municipal es en la periferia ya que este caso, las empresas tienen su propio personal de seguridad privada quienes resguardan el interior de los recintos. No obstante, las corporaciones municipales se encargarán de que haya condiciones seguras para la gente que entra y de mantener en orden los alrededores.