Miami, 12 oct (EFEUSA).- El interés por las telenovelas de latinos en Estados Unidos renace de tal manera que nuevas versiones de clásicos como «Betty la fea» y «La usurpadora» están rompiendo récords de audiencia y captando un público que prefería las plataformas de streaming o la programación en inglés.
De acuerdo con especialistas de este género audiovisual, traiciones, pasiones e intrigas familiares son recursos argumentales básicos que, gracias a una «modernización», han logrado reeditar audiencias consideradas perdidas.
Asimismo, el cariño a la TV en español fue comprobado por un estudio difundido el viernes por el sitio TelenovelaFan.com, donde se expone que un 61 % de los latinos apoyarían la creación de un «día nacional de las telenovelas» en el país.
«Este es el resultado del esfuerzo que hemos hecho para incrementar la calidad de la televisión en Estados Unidos», dice a Efe Marcos Santana, presidente de Telemundo Studios.
«Mi meta es que nunca más se burlen de una telenovela en un programa de televisión en inglés», afirmó el ejecutivo.
Javier y Marina Suárez, una pareja de millenials venezolanos que lleva ocho años en Miami, reconocen que comenzaron a ver televisión en español regularmente desde que se engancharon con «Betty en NY», a finales de este verano.
«Agarramos el final de varios capítulos mientras esperábamos el resumen de lo que había pasado en los partidos de la Conmebol (Confederación Suramericana de Fútbol) y nos atrapó», admitió Javier, de 34 años, quien trabaja en un parqueo de automóviles.
Ahora ellos ven «La usurpadora», una versión de Univision inspirada en la original homónima producida en México en 1998.
Los Suárez afirman que la comenzaron a mirar «por chiste». «Quería ver cuál era el cambio de la que vi con mi mamá a los 10 años. Me encanta», indicó Marina, de 31 años e higienista dental.
De acuerdo con Carlos Bardasano, presidente de W Studios, la productora asociada con Univision que está detrás de «Amar a muerte», «la televisión en español se ha reinventado con éxito sin perder su esencia».
«Por eso estos nuevos productos están trayendo a la pantalla chica audiencias que preferían las plataformas de streaming o programación en inglés», aseguró Bardasano.
«Amar a muerte» fue la teleserie que a principios de este año devolvió a Univision el primer lugar de la audiencia a las 9 de la noche.
Según la consultora Nielsen, «La usurpadora» está cerca de duplicar la audiencia que tiene Telemundo con «El final del paraíso», quinta temporada de la exitosa serie basada en la colombo-estadounidense «Sin senos no hay paraíso».
«El amor por el melodrama nunca va a terminar», sostiene Andrés Palacios, el protagonista de «La usurpadora», que está en el primer lugar nacional en el horario nocturno, de lunes a viernes, en mercados importantes como Los Ángeles y Miami.
«¿A quién no le gusta una historia de amor bien contada? Eso sí, ahora tenemos la suerte de que se están rompiendo los arquetipos del bueno y el malo. Los personajes son multidimensionales», desgranó a Efe Palacios.
Su compañera de elenco y coprotagonista de la serie, Sandra Echeverría, subrayó que «en esta versión, las dos gemelas en torno a las que se centra la historia son mujeres fuertes y con un trabajo importante en base a su psicología».
«La usurpadora» tuvo un rating promedio en México de 3,6 millones de espectadores. En Estados Unidos, con una población latina estimada en 58 millones de personas, la audiencia se ha colocado en un promedio de 1,6 millones de telespectadores.
Se trata de la primera producción dentro de un proyecto de Televisa y Univision para buscar un híbrido entre la telenovela tradicional y las series de moda.
Este proyecto, denominado en español «Fábrica de sueños» y «The Collection» en inglés, realiza nuevas versiones de títulos exitosos de Televisa. Uno de ellos será «Cuna de lobos», al que le seguirá «Rubí».
Esta tendencia comenzó con «Amar a muerte», una telenovela dramática escrita por Leonardo Padrón, producida por W Studios y en colaboración con Lemon Studios para Televisa y Univisión.
Con ella, Univision se impuso sobre la quinta temporada de «Señora acero», de Telemundo.
Los números luego se invirtieron cuando «Betty en NY», de Telemundo, fue la más vista con respecto a «Mi marido tiene más familia», una comedia que introdujo temas relevantes para la comunidad LGBT.
Para sorpresa de Telemundo, que temía que las transmisiones de partidos de fútbol del verano afectaran negativamente a «Betty…», la telenovela logró superar hasta los ratings de la segunda temporada de su producción más exitosa, «La reina del sur».
Así, los números indican que entre las dos cadenas están recobrando niveles de audiencia que no se veían desde las temporadas de 2014 y 2015, cuando sus teleseries tenían un promedio de 2,1 millones de espectadores en el codiciado grupo de audiencia de entre 18 y 45 años de edad.
Como contraste, en 2018, para llegar a superar los 2 millones de televidentes, los dos canales necesitaban combinar audiencias. Esta semana alcanzaron los 2,8 millones.