Madrid, 5 ago (EFE).- La constructora OHL perdió 38,5 millones de euros en el primer semestre del año, frente a las pérdidas de 15,3 millones en el mismo periodo de 2019, bajo el impacto en la cuenta de resultados de los efectos de la pandemia.
Las geografías más afectadas en la compañía controlada desde junio por los empresarios y hermanos mexicanos Luis Fernando y Julio Mauricio Amodio han sido España, Perú, Colombia y Chile, fundamentalmente en su actividad de construcción.
OHL ha estimado que la pandemia ha tenido sobre todo un impacto negativo en el resultado bruto de explotación (ebitda), cifrado en 25 millones por el efecto de los costes directos e indirectos derivados de la caída de la actividad, lo que ha comunicado este miércoles a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Sin los efectos de la COVID-19, OHL calcula que el ebitda habría superado los 45 millones, lo que hubiera mejorado los registros del primer semestre de 2019, si bien ha reflejado un saldo de 20,1 millones (22,7 millones en el primer semestre del año pasado).
El director económico y financiero de OHL, José María Sagardoy, se ha mostrado «moderadamente optimista» con los resultados obtenidos por la compañía en el semestre y ha comentado en una conversación con EFE que el ebitda resultante «es una cantidad gestionable, gracias a que el negocio en Estados Unidos ha compensado con creces la caída en Latinoamérica y España».
Sagardoy ha asegurado que para el próximo semestre y en el área de construcción la actividad de la compañía «no debería tener mayores efectos derivados del COVID-19», siempre que no se reproduzca un fuerte brote de la enfermedad.
Las ventas de la constructora que preside desde mediados de junio Luis Amodio se situaron por encima de los 1.350 millones, un 0,8 % menos que en el periodo enero-junio de 2019.
La compañía insiste en que la diversificación geográfica de los negocios de construcción le ha permitido «mitigar la caída» en la facturación (el 76,7% de la cifra de negocio de la compañía se ha realizado en el exterior).
En este sentido, el director financiero de OHL ha insistido en que esperan una segunda parte del año con una «reactivación de la cartera y una apuesta por las infraestructuras principalmente en Estados Unidos y Latam», en donde, ha dicho, sí ven crecimiento.
La cartera de OHL a 30 de junio ascendió a 4.962 millones, con un 43,3 % en Europa, un 36,4 % en Estados Unidos y un 18,4 % en Latinoamérica.
La contratación en el periodo ha supuesto 1.123 millones y la compañía espera que en el segundo semestre se revierta la ralentización de las licitaciones de la primera mitad de año en los mercados afectados por la pandemia.
En España, OHL prevé acometer algún proyecto privado en el corto plazo, a la espera de que más adelante puedan surgir licitaciones relacionadas con las infraestructuras.
En cuanto a la liquidez, la constructora aplazó ayer, martes, hasta el 4 de septiembre sus asambleas generales de bonistas para que estos le autoricen disponer de un préstamo sindicado de 140 millones con aval del Instituto de Crédito Oficial (ICO), después de no haber logrado el quorum suficiente en una primera convocatoria, que se aplazó hasta dos veces.
Sobre esta cuestión, Sagardoy ha apuntado que este aplazamiento «simplemente» les retrasa en 30 días la disponibilidad del citado crédito, pero ha recalcado que la empresa «está convencida» de su aprobación por parte de los bonistas.