Explota un nuevo conflicto en torno al libramiento carretero, ahora son los trabajadores quienes ayer dejaron al descubierto un fuerte conflicto laboral que provocó el paro de la obra en proceso de construcción.
Por tiempo indefinido fueron suspendidos los trabajos de construcción del libramiento carretero debido al incumplimiento de pago de más de 200 trabajadores que participan en el acarreo de materiales de construcción.
Desde hace dos meses, los afectados no reciben la paga pactada, por lo que ayer explotaron, apagaron las unidades de transporte de materiales de construcción y declararon estar en paro de laborales.
Advirtieron que no están dispuestos a seguir siendo la burla que ejerce el sindicato foráneo Sitrace que funge como intermediario en la paga y fue impuesto por la misma constructora, por lo que mientras no les paguen lo atrasado de dos meses, la obra seguirá suspendida.
Mientras tanto, no hay condiciones para encender nuevamente los camiones, pues no cuentan con recursos ni siquiera para cargar combustible y han tenido que recurrir a los endeudamientos para comprar refacciones y otros insumos necesarios en la operación de las unidades para el acarreo de los materiales de construcción.
“Nos dan largas y largas y no nos pagan, por lo que de plano tuvimos que optar por parar la obra; estamos muy endrogados, nosotros hemos invertido en llantas, muelles, combustible y otros gastos, como los sueldos de choferes, y no hemos podido cobrar ni siquiera lo que hemos gastado con la esperanza de que algún día nos van a pagar, pero ya no podemos más”, señalaron los afectados durante el paro.
A pesar de que no les han pagado, todos los días se esfuerzan por llegar a tiempo a la obra y cumplir con la jornada que inicia a las 8:00 de la mañana y concluye a las 6:00 de la tarde de lunes a viernes y los sábados de 8:00 a 1:00, pero la paga no llega y prácticamente están pagando por tener trabajo.
El conflicto laboral está afectando a los trabajadores no sólo económicamente, también les ha generado conflictos familiares por no llevar “el chivo”, “a mí ya hasta me divorciaron”, comentó uno de los afectados.
La protesta contó con la participación de trabajadores y los llamados hombre camión; el adeudo pendiente es por más de tres millones de pesos, y mientras no les paguen no levantarán el paro, porque sus familias comen todos los días y las deudas no perdonan.
“Estamos pagando por trabajar y pagando lo que no tenemos”, manifestaron al reprochar los abusos que han padecido desde el inicio de la obra, pues no se vale que no les paguen a tiempo.