México, 4 nov (EFE).- El presidente electo de Argentina, el peronista Alberto Fernández, buscará replicar programas sociales mexicanos en su país y calificó este lunes de «gran punto de arranque» la reunión en Ciudad de México con el mandatario Andrés Manuel López Obrador, donde coincidieron en estrechar los lazos.
«Hablamos del vínculo entre Argentina y México y la necesidad de profundizar la relación política y económica», dijo Fernández en una rueda de prensa desde el Palacio Nacional de México, luego de una reunión de varias horas con el mandatario mexicano.
Explicó que, durante este encuentro, le preguntó «mucho» al presidente mexicano sobre algunos de sus proyectos sociales estrella, como el de aprendices para jóvenes que no estudian ni trabajan, para ver «de qué manera» lo pueden «proyectar en Argentina».
Fernández definió de «formidable» la reunión con López Obrador, y dijo sentir hacia él mucho «respeto y admiración».
Por Twitter, el presidente mexicano dio un mensaje similar: «Con Alberto Fernández, presidente electo de Argentina, conversamos ampliamente como si nos conociéramos de toda la vida. Además, a nuestros pueblos los une una entrañable amistad».
Fernández, quien resultó ganador de los comicios argentinos el pasado 27 de octubre, se mostró confiado en que este encuentro va a «fortalecer» el vínculo de estas dos naciones.
«Tenemos muchas cosas en común que hacer por delante», aseveró.
El peronista hizo también hincapié en impulsar el comercio entre los dos países.
Por ejemplo, vio en la carne que se produce en algunas regiones de Argentina una nicho de oportunidad en México, y ello ayudaría al «desarrollo» de algunas zonas del país suramericano.
Con México «hemos tenido una relación que se fue perdiendo con el tiempo y hoy en día es una relación comercial bastante débil. Y nosotros esto lo hablamos con el presidente. (…) Y estamos confiados» en poder estrechar relaciones.
Cuestionado por los medios, dijo que en el plano regional ambos mandatarios expresaron «preocupación» por las situación en Ecuador y Chile y reafirmó que ambos mandatarios apuestan por la «democracia» y la «institucionalidad», que han de servir para lograr «igualdad».
Cuestionado por el Grupo de Puebla -conformado por decenas de líderes latinoamericanos progresistas- Fernández aseguró que él lo conformó antes incluso de ser candidato.
Reivindicó que este grupo busca «alternativas» a una realidad que ha imperado en los últimos años en América Latina, y lucha por la «igualdad social perdida» en la región.