JUCHITÁN, Oax., noviembre 4 (EL UNIVERSAL). –
Un nuevo derrame de combustible pesado se registró en la playa de bahía La Ventosa, en el puerto de Salina Cruz y provocó la molestia de los pescadores, restauranteros y ostioneros.
«Es la cuarta vez, en un periodo de 40 días, que la refinería «Antonio Dovalí Jaime», contamina nuestra zona de trabajo», señalaron molestos los pescadores mientras con las manos recogían los grumos de aceite negro mezclados con la arena de la playa.
Los pescadores dijeron desconocer si la contaminación se produjo desde los dos emisores de aguas industriales que conecta a la refinería con las aguas de bahía La Ventosa, donde constantemente Petróleos Mexicanos (Pemex) desfoga sus residuos aceitosos.
«Queremos que los funcionarios de la refinería vengan a resolver el problema, no pueden dejarnos con el problema, porque con la contaminación ¿quién vendrá a comprar nuestros productos? Tenemos familia, nuestros hijos van a la escuela y necesitamos ingresos», dijeron.
Desde el pasado domingo 23 de octubre, pescadores de las comunidades de Salinas del Marqués, Playa Brasil, Chipehua, Playa Cangrejo, entre otras que pertenecen a los municipios de Salina Cruz y Tehuantepec, reportaron un extenso derrame de hidrocarburos en sus áreas de pesca y venta.
Ante el reclamo de las autoridades municipales y de los pescadores, los funcionario de Pemex pusieron en marcha un plan de empleo temporal por 2 mil 500 pesos semanales, para que los propios pescadores limpien sus áreas de playa.