México, 28 oct (EFE).- Petróleos Mexicanos (Pemex) está entre las petroleras más endeudadas del mundo con una deuda que pasó de 1,05 a 2,2 billones de pesos (de 55.000 millones de dólares a 115,2 millones de dólares) en el gobierno anterior, informó este lunes su director, Octavio Romero Oropeza.
Al reunirse con diputados con motivo del análisis del informe del presidente Andrés Manuel López Obrador, Romero subrayó que en 2018, Pemex no tuvo recursos suficientes para pagar los intereses de su deuda, unos 122.000 millones de pesos (6.390,7 millones de dólares).
El director explicó que en el 2018, la estatal tuvo ingresos de más de 2 billones de pesos (alrededor de 100.502 millones de dólares), mismos que se vieron mermados por sus gastos de operación, pago de mercancía para reventa y gastos de inversión.
Además, en 2018, el pago de impuestos y derechos descontó a Pemex 933.000 millones de pesos (48.873 millones de dólares) de sus ingresos, indicó el director a los diputados de las Comisiones unidas de Energía y de Infraestructura.
Romero indicó que Pemex solo se quedó con un balance primario de unos 62.000 millones de pesos (unos 3.247 millones de dólares) una cantidad que «no ajusta ni siquiera para el pago de intereses de la deuda».
El director dijo que para atender esta situación, Pemex ha tomado cuatro acciones en los mercados internacionales: refinaciar las líneas revolventes bancarias; un prepago de deuda; refinanciamiento y una emisión de nuevos bonos, y un intercambio de bonos.
«Durante la nueva administración (del presidente López Obrador) se han realizado operaciones de refinanciamiento por aproximadamente 28.000 millones de dólares. De manera que las preocupaciones que traían las calificadoras, tendrían ya que estar disipadas», sostuvo el director.
Este lunes, al presentar su informe financiero, Pemex reportó una pérdida neta en los primeros nueve meses de 2019 de 8.982 millones de dólares, un 663,8 % más que los 1.176 millones de dólares del mismo periodo de 2018.
La mpresa estatal atribuyó la pérdida a la devaluación del peso registrada en el tercer trimestre y la caída del precio del petróleo en los mercados internacionales, informó la compañía en su reporte a inversionistas.
La compañía señaló que los ingresos sumaron 55.173 millones de dólares, un 14,9 % menos que en el mismo período de 2018.