Catedráticos y trabajadores de la Universidad Autónoma de Aguascalientes cuestionaron la complicidad de la rectora Sandra Yesenia Pinzón con su antecesor Javier Avelar González y demás copartícipes en la estafa millonaria contra la Máxima Casa de Estudios, al tiempo que exigieron que la investigación del caso no exima de responsabilidad a la actual titular de la institución.
“Por la salud ética de la UAA, es urgente la intervención de las autoridades competentes a efecto de deslindar responsabilidades y despejar todo atisbo de duda sobre quienes mancillaron a la Autónoma comprometiendo sus finanzas”, mencionaron los indignados maestros universitarios con el que llamaron “histórico atraco” perpetrado a través de la simulación de una “inversión fantasma”.
En un documento que hicieron circular en redes y que enviaron a HIDROCÁLIDO, firmado por maestros, trabajadores y alumnos, los inconformes advierten que la rectora Sandra Pinzón no puede eludir su responsabilidad de la estafa debido a desde años atrás estuvo ligada a su antecesor y a las decisiones que tomó Javier Avelar, “tan es así que fue quien la propuso para sustituirlo en la Rectoría”.
Los indignados maestros y trabajadores universitarios advierten que “no basta con la denuncia presentada ante la Fiscalía Anticorrupción, sino que la misma rectora Sandra Pinzón debe comparecer ante la autoridad investigadora y además aportar todos los documentos y pruebas de los más de 213 millones de pesos que perdió la Universidad Autónoma de Aguascalientes por la inversión simulada en la adquisición de los bonos basura”.
Asimismo y luego de mencionar que “es muy ruin que ahora se le quiera dar la categoría de clasificada a toda la documentación e información de la estafa millonaria contra la UAA”, los firmantes del escrito insistieron en que por el bien de la institución deben ser enjuiciados todos los ex-funcionarios y actuales funcionarios que tengan responsabilidad, independientemente de su rango o nivel que puedan en la institución y entre la sociedad.
En ese sentido, resaltaron la necesidad de que la investigación y el peso de la ley no se dirija únicamente con quienes pudieron haber realizado las operaciones, sino que se debe ir a las cabezas que estuvieron de acuerdo en el desvío del llamado Fondo de Contingencia, pues éstos y quienes están jugando el papel de cómplices de ninguna manera pueden ser liberados de la millonaria estafa en perjuicio de las finanzas de la Universidad Autónoma de Aguascalientes.