Lo único que lograron las mujeres que vandalizaron el Centro Histórico en la pasada marcha por el Día Internacional de la Mujer fue el repudio de la sociedad, no es posible querer construir sobre este tipo de actos, ellas debieron ser ejemplo de lo mismo que están reclamando, es decir, si están exigiendo respeto, pues deberían actuar con orden y respeto; están exigiendo consideración, pues ellas debieron ser cuidadosas y no lastimar. Aquí cometieron vandalismo y eso debe ser castigado con cárcel, sean hombres o mujeres, lo único que demostraron es que son personas inadaptadas, nada tiene que ver la libertad de expresión con el vandalismo, eso no abona en nada socialmente, declaró Humberto Martínez Guerra, presidente de la CANACO.
El líder empresarial manifestó su inconformidad al comentar que es una contradicción terrible, pues todo mundo es libre de ejercer su derecho a manifestarse, pero no destruyendo lo que se les pone enfrente; si ellas están reclamando violencia, están haciendo lo mismo que les molesta, el destruir, golpear, lastimar a la ciudad, al Centro Histórico, que deben de cuidar y preservar, pues es el símbolo característico del Estado y es hasta cierto punto un emblema que nos da identidad a los hidrocálidos.
Ciertamente, dijo que hay muchas maneras de expresarse, pero eso es vandalismo y debe ser castigado por la ley; sin importar si son hombres o mujeres, el vandalismo es una violación a la ley y nada tiene que ver con la libertad de expresión, “estas son personas desadaptadas socialmente que merecen la cárcel, el vandalizar no son expresiones de libertad, sino de libertinaje, y eso no es lo correcto”.
En ese sentido, destacó que como ciudadano, como empresario y como persona trabajadora que busca cada día sumar, siempre ha apoyado las causas justas de las mujeres, “hay mujeres que marcharon en todo el mundo y no lastimaron a nadie, este tipo de acciones vandálicas y de libertinaje nos lastiman y nos ofenden a todos, tanto a mujeres y hombres que queremos igualdad, que queremos sumar, que queremos de manera conjunta trabajar por los espacios que merecen las mujeres, pero eso no abona en nada, socialmente, por lo tanto nuestra postura siempre será de rechazo, condenamos este tipo de actos y creemos que deben ser castigados”, dijo.
Finalmente, Martínez Guerra cuestionó que, qué lograron con eso, sólo la sensación de repudio de la sociedad en general, pues la Exedra no les hizo nada, es un símbolo del Estado y si tiene cosas que reclamar pues hay muchas formas, pero sin destruir y siendo respetuosas del entorno, las invitó a manifestarse de manera ordenada, a organizarse, incluso si se lo proponen y realizan “un día sin mujeres”, eso es una manifestación contundente, silenciosa, respetuosa, a que hagan un paro nacional cuando no estén de acuerdo en algo, en lugar de ser un grupo de mujeres desbocadas que rayan en la incongruencia, concluyó.