Soplan vientos de fronda… se barrunta en el escenario político nacional un encontronazo más entre el Presidente de la República y el Instituto Nacional Electoral. ¿La razón? Que el INE no tiene dinero para llevar a cabo la consulta sobre la revocación del mandato.
Ante el enojo del mandatario, que antes de conocer la decisión de plano dijo que era una ‘chicanada’ la propuesta, el órgano electoral votó en sesión extraordinaria y de forma dividida decidió posponer, temporalmente, eso sí, el ejercicio hasta que no tenga los recursos monetarios suficientes.
Lo que se infiere es que vendrán nuevos encontronazos entre el INE y Andrés Manuel López Obrador, quien ha descalificado en público y en privado todo lo que gira alrededor del árbitro electoral, por lo que se espera que esta vez no sea diferente, lo que en definitiva viene a enrarecer más el ambiente político nacional actual.
Ahora se espera que la Suprema Corte de Justicia de la Nación o, en su caso, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación se pronuncien ante esta decisión que por supuesto hizo enojar al jefe del Ejecutivo.
Pero ayer por la mañana el mandatario no se aguantó y lo que menos dijo a los consejeros del INE fue que no son auténticos demócratas y que sólo fingen serlo, por lo que se espera que en las próximas horas se pronuncie nuevamente y que se vaya duro y a la cabeza contra el instituto, aunque no será la primera vez, y lo que pase en esas cúpulas afecta o enrarece al resto del país.
La consulta sobre la revocación del mandato es una estrategia del Presidente, dicen los enterados, para afianzar su poder, pues bien saben él y sus estrategas que mantienen una envidiable aprobación de los mexicanos, a pesar de todos los pesares.
Entonces no se entiende la molestia, sobre todo porque en público y en privado ha manifestado, cada vez que tiene oportunidad, que al terminar su sexenio se va a retirar de la vida pública y que se irá a su pintoresca finca de Tabasco, pero quienes lo conocen saben que es un hombre de lucha y que desde joven la política lo apasiona, tanto, que su precampaña presidencial duró varios años.
No perdamos de vista que López Obrador ha estado en varias filas partidistas desde hace muchos años, pasando por el Revolucionario Institucional, después con el Partido de la Revolución Democrática y finalmente con el partido que fundó desde sus raíces: Movimiento de Regeneración Nacional, MORENA, que es el que finalmente lo pudo encumbrar a su objetivo de toda la vida: la Presidencia de la República.
Y aunque faltan varios meses más para el siguiente proceso electoral esto le viene a poner sabor al caldo y, eso sí, este conflicto no será el primero ni el único, basta dar un vistazo al panorama nacional para ver cómo está agitado el ambiente y Aguascalientes es ejemplo de ello.
En fin, este nuevo conflicto viene a ser una raya más al tigre, ya que este tema dará de qué hablar por varios días, a menos que López Obrador se saque uno de sus acostumbrados ases de la manga y dé la sorpresa dando un manotazo en el escritorio sacando un nuevo decreto que, por supuesto, lo beneficiaría.