El mejor juez por su casa empieza y el presumir que todo está bien, que todo se cumplió en tiempo y forma, suena a acto vanidoso y presuntuoso.
Esto es lo que hace el todavía mandatario de Aguascalientes cuando prácticamente va de salida y obvio, nadie vende pan frío.
Asegura que cumplió todos sus compromisos, pero las cifras y los dichos sugieren otra cosa, pues a su salida se van a quedar muchas cosas pendientes, algunas porque no le alcanzó el tiempo, pero la mayoría porque por muchas circunstancias no se pudieron llevar a cabo.
Un par de ejemplos recientes se pueden mencionar: el libramiento carretero, que entró en funcionamiento a tiros y tirones, pues fueron más los problemas que las soluciones y hasta los tribunales llegó la discusión.
El otro asunto, más reciente todavía, es el conflicto que tiene con el sector salud y cuyas quejas están debidamente documentadas en la edición de este día.
Pero creemos que en muchos aspectos el gobernador saliente quedó a deber, pues literal, faltando un cuarto para las doce, le renunció el segundo de abordo, el secretario general de Gobierno, lo que causó extrañeza y preocupación y apenas unos días antes removieron al contralor del Estado, quien es el encargado de vigilar los recursos de las dependencias del Gobierno actual, lo que su salida causó mucho ruido.
Obvio que no todo lo que hizo el mandatario está mal, pero temas importantísimos no han tenido claridad, pues por ejemplo anda por ahí escondido un ex-funcionario que debe cuentas y que estuvo al frente de importantes carteras, donde los dineros sobran y las cuentas faltan.
Uno de los grandes pendientes es la seguridad, pues quien fuera su secretario de esa estratégica área está en la cárcel, acusado de tortura y quién sabe qué más le comprueben.
En este tema, en el de seguridad, está el muy sentido caso de los desaparecidos, porque hay muchos ciudadanos que no aparecen, ni vivos ni muertos y ni sus luces.
Un tema que se cuece aparte es el de la gestión de la pandemia, con decisiones que se tomaron sin importar lo que dictaba el sentido común, como la realización de muchos eventos masivos que por momentos puso excesiva presión al sector salud.
En movilidad, donde dice que tuvo otro acierto, pues sería bueno preguntarles a los afectados por la entrada de foráneos al transporte urbano, aunque siempre los que la llevan son los usuarios, el sector más vulnerable.
En educación estaría bueno cuestionar al líder magisterial, con quien no dejó de tener encontronazos una y otra vez, pues ya era muy común que llamara flojos a los maestros.
Y ejemplos abundan, pero el gobernador insiste en que cumplió al 100 por ciento sus compromisos, pero hay que preguntarle a sus gobernados, pues alabanza en boca propia es un Vituperio.
La sociedad tiene la última palabra.