Una velada llena de alegría, cordialidad y buenos deseos disfrutaron las familias del Club Campestre, en medio de la celebración navideña que ya se ha vuelto una tradición llevar a cabo.
Esta época de grandes emociones, en la que florecen los valores y es grato compartir con los allegados, se vivió de manera muy especial en el mencionado club social, a donde acudieron las familias completas para gozar de la tertulia en la que, por supuesto, se llevó a cabo la petición de posada con cantos, velas y luces que tanto emocionaron a los chiquitines; no faltaron tampoco los antojitos de temporada como los buñuelos, tamales, ponche, etcétera.