CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 25 (EL UNIVERSAL).- La divisa mexicana en los mercados internacionales se ubica en los 17.35 pesos por dólar al mayoreo, lo que significa una depreciación de 0.87% o 15 centavos respecto a la jornada anterior, de acuerdo con información de Bloomberg.
En la sesión overnight, el tipo de cambio presentó volatilidad con sesgo alcista, debido a la creciente fortaleza del billete verde.
El Índice Dólar, que compara el comportamiento de la moneda estadounidense frente a las otras seis principales divisas del mundo, amanece con una apreciación de 0.15%. El euro baja 0.38% frente al billete verde, mientras la libra pierde 0.25%.
El bitcoin, la divisa con mayores activos en el mercado de las criptomonedas, retrocede 1.9%, manteniendo poco apetito de los inversionistas.
Mercados accionarios
Al comienzo de la semana, los mercados accionarios a nivel mundial presentan movimientos negativos, lo que aún refleja el sentimiento de cautela tras los recientes comentarios de la Reserva Federal, los cuales anticipan una política monetaria restrictiva por más tiempo.
Adicionalmente, los inversionistas se mantienen atentos a las afectaciones económicas en China, así como a las huelgas en EUA, particularmente la del sector automotriz y la de escritores de Hollywood.
En Wall Street los futuros anticipan una apertura negativa, con el Nasdaq disminuyendo 0.2% debajo de su valor teórico, mientras el rendimiento semanal pasado fue el peor desde marzo. En México para esta semana los especialistas de Banorte prevén un rango de operación para el Índice de Precios y Cotizaciones de la BMV entre 50 mil 800 y 52 mil 900 puntos, tras el cierre del viernes en 51 mil 677 unidades.
Por su parte, Europa cae y el Eurostoxx se ajusta 0.8%. Asia cerró con pérdidas, resaltando China (Hang Seng -1.8%), reflejando bajas en las inmobiliarias tras signos de estrés crediticio en más compañías.
El precio del petróleo estadounidense WTI, de referencia para la mezcla mexicana, retrocede 0.2%, aunque se mantiene en niveles elevados ante la escasez de suministros. Los especuladores han incrementado sus posiciones alcistas en el WTI a máximos desde febrero de 2022.