México, 8 jun (EFE).- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo que es «irrespetuoso de la investidura presidencial» acusarlo de orquestar las protestas por la muerte del joven Giovanni López luego de un procedimiento policial en Jalisco, tras las insinuaciones del gobernador de ese estado, Enrique Alfaro.
«No se pueden lanzar esas acusaciones a la ligera, echarle la culpa a otros de lo que está uno enfrentando, de los problemas que cotidianamente tiene uno que enfrentar como gobernante», aseguró el mandatario desde el Palacio Nacional.
Alfaro y López Obrador mantienen una relación tensa por la vieja negativa del gobernador de unirse al partido oficialista, el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), que se recrudeció el pasado fin de semana con la muerte bajo custodia policial de un joven detenido por supuestamente no llevar cubrebocas.
El suceso desató varios días de protestas violentas contra la represión policial en Guadalajara, la capital del occidental estado de Jalisco.
El político estatal aseguró que «detrás de todo lo que está sucediendo en este caso en Jalisco hay intereses muy precisos y muy puntuales construidos desde Ciudad de México, desde los sótanos del poder».
Además, este domingo declaró en un noticiero local que se pretendía crear en las manifestaciones contra la violencia policial sucedidas en Guadalajara «un nuevo Ayotzinapa», caso en el que desaparecieron 43 jóvenes.
«Estamos hablando de que Jalisco recibió una embestida brutal de grupos de intereses difíciles de identificar que construyeron una historia, una estrategia, que buscaron que hubiera muertos en Jalisco», sostuvo el gobernador.
Ante esas acusaciones, López Obrador dijo que no quiere «tener pleito con nadie», pero defendió que él no está «acostumbrado a tirar la piedra y esconder la mano».
«No creo que ese sea el mejor método de relacionarnos», lanzó antes de descartar entrometerse en lo que está sucediendo en Jalisco, porque para eso ya existen la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la Fiscalía General de la República (FGR).
«Lo dije desde la mañana del viernes, que tiene que intervenir la CNDH por oficio y en su caso la FGR, que es independiente, que es autónoma», insistió.
Durante las protestas en Guadalajara, varios organismos de derechos humanos nacionales e internacionales reprocharon que unos 80 jóvenes fueran arrestados por policías encapuchados que los golpearon, les robaron y los subieron a camionetas no oficiales para luego abandonarlos en colonias de la periferia.
En Ciudad de México también se vivieron manifestaciones violentas por la muerte de Giovanni López y por la de George Floyd en Estados Unidos, y este lunes el presidente reconoció que el racismo existe en el país.
«El racismo existe en México, desgraciadamente, lo mismo, encubierto por la hipocresía», condenó López Obrador.