Con la alegría desbordada en su corazón de niña, la pequeña Emily Rodarte Arroyo recibió a Cristo en su vida a través de la Eucaristía.
La emotiva ceremonia, preparada por Érick Rodarte y Gabriela Arroyo para que su heredera llevara a cabo su Primera Comunión, tuvo lugar en la parroquia de Nuestra Señora de la Soledad, en el Campestre, donde se congregaron amigos y familia participando con gusto del ceremonial.
Ana Celia Rodarte se colocó a un lado de Emily, tomando el importante rol de madrina, y con fe y devoción le ayudó en sus primeras oraciones como comulgante.
Posteriormente, un lindo jardín de la zona norte recibió a la festejada y sus invitados, compartiendo amenidades, banquete y mucha alegría.