México, 19 ago (EFE).- La mitad de pacientes con enfermedades crónicas en Latinoamérica no ha seguido adecuadamente sus terapias debido a la pandemia, por lo que los programas de entrega de medicamentos y tratamientos a domicilio serían una forma eficaz de mejorar este problema para evitar complicaciones a quienes las padecen, coincidieron expertos en México.
«No ha habido concientización del problema. Los desafíos son muy grandes todavía», señaló en conferencia de prensa David López, director general de la farmacéutica BioMarin.
En junio pasado, la Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó un estudio elaborado en más de 155 países del mundo, el cual revelaba que la mitad de las personas que sufren hipertensión, diabetes, hemofilia, enfermedades raras, cáncer, entre otras, han interrumpido sus tratamientos debido al coronavirus.
López explicó que entre las principales razones por las que los pacientes no siguen sus tratamientos están el miedo al contagio que tienen por acudir a un hospital.
«Los pacientes son los más afectados al perder beneficios en salud», expresó y aseguró que la interrupción en los tratamientos comprometen seriamente la vida de los pacientes.
INICIATIVA BUSCA PALIAR EL PROBLEMA
Cristóbal Thompson, director ejecutivo de la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica (AMIIF), señaló que aunque siempre se había hablado que la pandemia sería un tema complicado a nivel global, no se sabía sobre las consecuencias de la misma.
Indicó que la pandemia por COVID-19 evidenció que el sistema de salud en México está fragmentado por lo que cada institución toma sus decisiones con respecto a los tratamientos y los pacientes son los más afectados.
«Lo estamos viviendo. El impacto en salud, en salud mental, económico, está siendo muy complicado a nivel global y no teníamos claro el impacto secundario y cómo iba a afectar el seguimiento a pacientes de enfermedades no transmisibles», indicó.
En ese sentido, la AMIIF ha planteado la implementación de un programa llamado Entregas Seguras para que los pacientes reciban en su casa, en tiempo y forma, el tratamiento a través 12 compañías que ofrecen más de 70 moléculas que ayudan a mejorar el control de los enfermos.
La iniciativa, entre las que se encuentran farmacéuticas como Roche y Takeda, entre otras, intenta apoyar para que se entreguen o aplique tratamientos biológicos y biotecnológicos de hospitales públicos y privados en casa para que sigan de manera normal.
Julio Lacorte, director de Acceso para Takeda, indicó que las autoridades de salud mexicanas han visto esta iniciativa «con buenos ojos» pero aún ha faltado voluntad de los hospitales para lograr que se implemente.
Explicó que la principal barrera es que los hospitales tienen miedo con respecto al manejo de los biológicos en cuando a cómo se transportan los productos, además de que no hay claridad legal sobre quién se hace responsable de los mismos.
También, apuntó que existe desinformación del personal de salud sobre cómo se manejan los efectos adversos, quién aplica la terapia y cómo deben capacitarse para aplicar estos tratamientos en los domicilios.
Yessica Rubio, líder del programa de apoyo al paciente en Roche México, dijo que la farmacéutica tiene este tipo de programas desde hace años «pero por la pandemia la aceleramos», y recalcó que, de ser necesario, esta iniciativa permanecerá a lo largo del tiempo.
Los expertos explicaron que la aplicación de tratamientos a domicilio es una práctica que se ha realizado por al menos dos décadas.
Sin embargo, la pandemia ha urgido que se implemente en varios países de Latinoamérica, aunque México sigue con cierta reticencia.
De los tratamientos que proponen para entrega a domicilio la mayoría son de oncología y hematología, así como para tratar padecimientos endocrinológicos, lisosomales, de artritis reumatoide, inmunología, cardiología, infectología, sistema nervioso central y respiratorio.