En un auténtico caso para ripley… murciélago con rabia llegó a la sede de la Secretaría de Salud a morirse y el zorrillo con rabia que apareció en Santa Mónica atacó a dos personas, pero por fortuna a ninguna de ellas les transmitió la letal enfermedad, reveló ayer la directora de Inteligencia en Salud del ISSEA, Marie Salas Valenzuela.
“Estos son los casos más recientes de rabia silvestre que hemos tenido en el Estado, ocurrieron recientemente, pero afortunadamente no hubo consecuencias ya que en los dos casos de las personas que fueron mordidas por el zorrillo, una de ellas (veterinaria que lo atendió) contaba con la vacuna y la segunda víctima fue atendida de inmediato, aunque no presentó sintomatología”, explicó.
La especialista señaló que en el primer caso, que corresponde a un murciélago, curiosamente el animal fue a dar al edificio del ISSEA, por el rumbo de las Arboledas, y tras ser estudiado el caso en el laboratorio resultó que estaba infectado de rabia, por lo que se aplicó el protocolo que se marca para estos casos sin encontrar ni siquiera casos sospechosos por la posible transmisión de la rabia.
El otro caso, el del zorrillo que deambulaba por el rumbo del rancho Santa Mónica, al sur de la ciudad, resultó diferente porque sí se reportaron dos personas que tuvieron contacto físico con el animal, por lo que de inmediato fueron localizadas para iniciar el tratamiento respectivo, incluyendo los estudios de laboratorio, mismos que resultaron negativos a la rabia.
Esto se debe, explicó, a que la veterinaria que tuvo contacto con el animal contaba con la vacuna antirrábica, mientras que el otro caso, que corresponde a una persona joven que pretendió atrapar al zorrillo, acudió con oportunidad a recibir atención médica en cuanto fue mordido por el animal, por lo que Aguascalientes se mantiene aún libre de lo que es la rabia humana.
La doctora Salas Valenzuela dijo que existe la posibilidad de que en algunas zonas del Estado puedan surgir nuevos casos de animales silvestres infectados de la rabia, lo que se debe a que por el crecimiento de la mancha urbana se están invadiendo los hábitats de las especies silvestres, siendo entonces que salen generando el riesgo de que puedan atacar y en su caso hasta transmitir la peligrosa enfermedad sea a otros animales o bien a las personas que puedan tener contacto con ello, por lo que dijo que lo mejor es abstenerse de pretender capturar y llevarse a casa ese tipo de animales.