Regulación Sanitaria autorizó la reapertura de la Alberca Olímpica, luego de que sus administradores fueron obligados a cumplir con las medidas sanitarias obligatorias para prevenir una serie de problemas en la salud de los usuarios.
En atención a una serie de quejas y reportes de quienes pagan por uso de la alberga, las autoridades sanitarias ordenaron la suspensión de actividades y procedieron a tomar muestras del agua tanto en la alberca como en regaderas y demás áreas para hacer los análisis de laboratorio respectivos y girar en base a sus resultados las medidas correctivas.
La medida dictada por las autoridades sanitarias obligó a los administradores de la Alberca Olímpica a realizar la limpieza, mantenimiento e higienización de la misma, así como a cumplir con otras medidas esenciales para proteger la salud de los usuarios.
Al cabo de una visita de verificación que fue encabezada por el titular de Regulación Sanitaria del ISSEA, Octavio Jiménez Macías, personal del área tomó muestras del agua de la alberca y realizó las respectivas pruebas químicas, para comprobar que el nivel de cloración cumpla con lo ordenado por la norma sanitaria aplicada para este tipo de lugares.
Jiménez Macías indicó que se supervisó el cambio de los filtros de agua, los cuales evitan la presencia de algas o alguna otra materia orgánica, que fue reportada en su momento por los usuarios de la Alberca Olímpica que administra el Instituto del Deporte de Aguascalientes.
Mencionó que en el caso específico de la Alberca Olímpica, si bien es cierto que en ningún momento se puso en riesgo la salud de los usuarios, sin embargo sí fue necesario aplicar las mediciones correspondientes para demostrar que está en óptimas condiciones para su funcionamiento.
El funcionario indicó que de esta forma se garantizan las condiciones sanitarias a todos los usuarios de la Alberca Olímpica de Aguascalientes.
Por último, aseveró que la Dirección de Regulación Sanitaria mantiene la vigilancia permanente a todas las albercas del Estado, tanto públicas como privadas, para verificar que cumplan con su programa de mantenimiento y no representen algún riesgo sanitario para los usuarios.