MONTERREY, NL, mayo 10 (EL UNIVERSAL).-
Quizá suene exagerado, pero desde hace dos partidos, André-Pierre Gignac no hace gol en Liga MX. Su último tanto fue en la Jornada 16 ante el Puebla, con los que completó siete goles en el torneo regular, una cifra que cualquier delantero envidiaría.
Pero para el francés no, para el histórico de los Tigres es muy poco y por eso adelante que en la Liguilla, en los cuartos de final contra el deportivo Toluca, espera explotar.
«Estoy tranquilo, sé que me va a caer la pelota, a veces no va a entrar, últimamente no he andado fino, pero estoy aquí», mencionó en rueda de prensa al término del entrenamiento del equipo regio de cara al juego contra los Diablos Rojos de este jueves en el Volcán.
Además, dijo que según su perspectiva, ante los Tigres, todos los equipo se crecen y los porteros se vuelven Superman. «Lo tomo bien, hace 3 meses en el gol de Pumas era el mejor y tenía 5 o 6 goles en 7 juegos. Pasó lo que pasó, pegan en los postes, porteros que contra nosotros eran supermanes y en partidos después les faltaban manos, sabemos que contra nosotros es un partido que hay que jugar al 200 por ciento».
El francés quiere dejar atrás lo que sucedió en el torneo regular, donde los felinos tuvieron tres técnicos: Diego Cocca, quien se fue a la Selección Mexicana; Marco Antonio Ruiz, quien fue despedido y Robert Dante Siboldi.
«Estamos trabajando, sabemos lo que ha pasado, pero ahorita es nuevo torneo. La Liguilla es otra cosa y es otro nivel de concentración. Estamos preparados, trabajamos muy bien y hoy en día los partidos son complicados contra cualquier rival, porque si te alcanza físicamente todos los clubes profesionales se empareja mucho el nivel», indicó.