CIUDAD DE MÉXICO, marzo 23 (EL UNIVERSAL).- El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que es una asignatura pendiente el limpiar al Poder Judicial de la Federación porque ahí –dijo- impera la corrupción, es faccioso y está completamente distorsionado e impactado por ese flagelo.
«Hay honrosas excepciones jueces, magistrados, ministros, pero como Poder, está completamente distorsionado, impactado por la corrupción y por la tendencia a proteger a los de arriba, a la élite, no protegen al pueblo, es un poder faccioso, esta para atender nada más a los de arriba, no al pueblo».
En conferencia de prensa, el Presidente de la República reconoció que una reforma al Poder Judicial es un asunto complejo y no es fácil porque no solo tiene que ver con los jueves, los magistrados, los ministros y su estructura, tiene que ver con la abogacía.
«Si nos dijeran a los que estamos aquí, cambiemos a todos los jueces, mil, mil 500 abogados, profesionales, honestos, cercanos a la gente, con vocación de hacer justicia, nos costaría trabajo conseguirlos».
Señaló que una de las cosas que hay que cambiar y quitar cuando se le da oportunidad a un profesional en un cargo es el requisito que tenga 10 años de experiencia.
«Porque entre más experiencia están más maleados, hay unos que a los 10 años ya son gánsteres. Si se quita eso y se le da oportunidad a los que están egresando de las facultades que vienen con todo el entusiasmo de hacer justicia y apliquen la máxima de que al margen de la ley nada y por encima de la ley nadie y protegen de los abusos que comete el fuerte, había más posibilidad».
Señaló que la reforma al poder judicial debe comenzar en los procesos educativos, en los planes de estudios de las universidades.
«El Poder Judicial debe reformarse y debería de ser motivo de análisis al interior del Poder Judicial, abrir foros para analizar esto», dijo.