CIUDAD DE MÉXICO (EL UNIVERSAL).- La aprobación de la reforma eléctrica, además de ser inconstitucional, pretende hacerse en momentos en que no hay recursos económicos para que el gobierno invierta lo suficiente para atender la industria eléctrica.
En la mesa de análisis de EL UNIVERSAL, «Apagones, Reforma eléctrica, ¿Cómo está la industria eléctrica?», especialistas afirmaron que la propuesta actual va en contra de la Constitución, además de que al apostarse a energías contaminantes, que son ineficientes, aumentarán los costos de producción.
El socio de la práctica de Energía de la firma Thompson & Knight, Claudio Rodríguez-Galán, afirmó que la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica «nace muerta, absolutamente muerta porque no tiene un sustento Constitucional… vendrá lluvia de amparos y acciones de inconstitucionalidad».
Además de que la reforma eléctrica son violatorios al artículo 133 constitucional, porque todos los tratados internacionales tienen la misma jerarquía que la Constitución, así que bajo el derecho internacional también será materia de controversias.
Aunque la apruebe el Congreso y se vaya a publicar en el Diario Oficial de la Federación la nueva legislación, seguramente se recurrirá a los amparos. Esto tomará unos meses porque una suspensión definitiva lleva tres meses y una sentencia final aproximadamente 18 meses.
Vendrán más demandas porque la Suprema Corte ya dio su fallo en contra de políticas que dictó la Secretaría de Energía, así que será una pérdida de tiempo esta reforma, porque además de que se necesita invertir recursos que no se tienen, los proyectos tomarán hasta cinco años en concretarse, dijo el analista del sector energético, Ramses Pech.
Explicó que al dejar al sector eléctrico en manos de Comisión Federal de Electricidad (CFE), habrá que darle más recursos, pero no existen los suficientes para hacer frente a las necesidades de la industria.
«Falta dinero, no tenemos y la recaudación no será igual que el 2021. Si a Comisión Federal de Electricidad y a Pemex le diste 850 mil millones de pesos para el 2021, cálculos que realizamos se necesitan para estas dos empresas 1.4 billones de pesos, entre el 25% y 30% de lo que se asignó. De dónde sacaremos ese dinero», explicó.
La analista del sector energético, Casiopea Ramírez, afirmó que al producir con energías contaminantes, seguramente se incrementarán las tarifas eléctricas, pero no se trata de incrementar subsidios, porque todo el sobrecosto de producir energía son recursos que pagan los contribuyentes y que en lugar de dirigirse a atender otros servicios se enviarán a subsidiar.
Añadió que habrá una pérdida de bienestar a nivel doméstico, industria, sector servicios, comercio, en pocas palabras en todo el país porque aumentará los costos de producción, habrá efectos adversos en la calificación crediticia, impactará la economía, afectará la seguridad energética e incrementará la contaminación.
«Ni siquiera hay respaldo técnico y esto va a provocar un detrimento de la calificación del país como un país atractivo para desarrollar cualquier tipo de actividad económica», expuso.