Madrid, 22 oct (EFE).- La entronización de Naruhito ha reunido a numerosas miembros de monarquías europeas, en una colorida ceremonia de algo más de media hora que tuvo lugar en la Sala del Pino del Palacio Imperial.
Entre los dos mil invitados, destacaron los estilismos de las herederas de Dinamarca y Noruega, así como las reinas de Bélgica, Holanda y España.
La reina Letizia ha brillado en esta ceremonia nipona con un vestido largo floral de cuello a la caja y manga larga, firmado por Matilde Cano, una pieza que ha acompañado con una diadema rosa empolvado de la sevillana Nana Golmar y espectaculares joyas, en las que ha sobresalido como el collar de chatones de la reina Victoria Eugenia, pulsera a juego y pendientes de brillantes con esmeralda.
Además ha lucido la banda de la orden japonesa de la preciosa Corona, una distinción que recibió durante su visita de Estado hace dos años, una condecoración que también ha lucido Máxima de Holanda y Matilde de Bélgica.
El segundo puesto es para Máxima de Holanda quien ha llamado la atención con un vestido gris con flores grabadas, un diseño de la firma Natán que estrenó el Día del Príncipe en 2017.
En esta ocasión lo ha combinado con un fabuloso tocado en forma de flor, guantes y cartera en la misma gama cromática. En cuanto a joyas, la reina ha optado por un collar de diamantes de estilo «choker», pendientes con un fabulosos diamantes y pulsera a juego. Máxima también lucia la banda de la orden japonesa de la Preciosa Corona.
La princesa Victoria de Suecia, que ha acudido a la entronización junto a su padre, el rey Carlos Gustavo, se ha decantado por un vestido de Escada azul «klein» de cuello a la caja y manga larga, un diseño tan sencillo como favorecedor que ha conjuntado con una pamela de medio lado, un estilismo que le conduce a un tercer puesto.
La reina Matilde de Bélgica y la princesa Mary de Dinamarca han coincidido en lucir un vestido capa prácticamente igual, un diseño que lució Máxima de Holanda para su investidura en 2013.
Después, la reina Letizia en 2017, también lució un diseño capa, de Stella McCartney, con el que asistió a la celebración del 50 cumpleaños de Guillermo de Holanda.
La reina belga, que ocupa el cuarto puesto, ha optado por un modelo rosa empolvado con capa desde los hombros, una creación que ha completado con un tocado «pillbox» y cartera de mano en el mismo tono. En cuanto a las joyas, ha preferido lucir únicamente unos pendientes de diamantes rematados con perlas.
Y el quinto lugar es para la princesa danesa que ha asistido a la ceremonia de entronización con un vestido gris, casi idéntica al de Matilde de Bélgica, una pieza que ha combinado con un tocado granate a juego con una gargantilla, pendientes y anillo de brillantes y rubíes. Sobre el vestido lucía la banda la Orden del Elefante, la más importante de Dinamarca.
El gran duque de Luxemburgo, Carlos de Inglaterra, el príncipe Haakon de Noruega y Alberto de Mónaco, que han asistido a la entronización sin sus respectivas esposas, han lucido frac con diversas condecoración.
Al igual que Felipe de Borbón, Guillermo de Holanda, Felipe de Bélgica, Carlos Gustavo de Suecia y Federico de Dinamarca que también bien han cumplido el protocolo vistiendo frac.