CIUDAD DE MÉXICO, febrero 28 (EL UNIVERSAL).-
Ricardo Casares está respondiendo favorablemente a la intervención que tuvo tras sufrir un infarto el pasado lunes momentos previos a iniciar el programa «Venga la Alegría», donde es conductor desde 2016.
Casares, de 43 años fue atendido rápidamente cuando tuvo los primeros síntomas del infarto, sus compañeros del matutino de Azteca se percataron de que el conductor no se sentía bien, pues en uno de los pasillos de la empresa se estaba agarrando el pecho, les comentó que le dolía de manera anormal, por lo que llamaron a los paramédicos, y posteriormente se fueron al hospital.
La pronta atención hizo la diferencia, Ricardo fue su propio héroe cuando le dio luz verde a Pato Borghetti para que llamara a una ambulancia; tras el susto, sus compañeros han estado en contacto con la familia de su colega, y su hermana Mariana dio detalles de su evolución.
Ayer en la noche, Mariana, hermana del conductor, se encontraba con él cuando le pidió que le prestara su celular, quiso poner un breve pero importante mensaje en sus redes sociales: «Gracias», por todas las muestras de cariño que ha recibido tras sufrir un infarto el pasado lunes.
Mariana dijo a «Venga la Alegría» que si todo sigue bien como hasta ahora, en la noche de hoy miércoles podían pasar a su hermano Ricardo a terapia intermedia.
Los médicos les han indicado que posiblemente este fin de semana pueda salir del hospital, y tendrá que permanecer en reposo tres semanas; Ricardo Casares ha tenido una buena evolución, sin arritmias ni taquicardias, señales de una pronta recuperación.
Mariana, hermana de Ricardo Casares comentó que el conductor está sorprendido por lo que le ocurrió, pues tiene una vida saludable, no toma alcohol y come bien, sin embargo está agradecido porque vivió para contarlo.