Mérida (México), 22 sep (EFEUSA).- El cantante puertorriqueño Ricky Martin cerró de forma contundente la XVII Cumbre de los Premios Nobel de la Paz con un explosivo concierto lleno de sensualidad y un llamado a vivir libres de condiciones.
«Hay lugar para todos, pero para lograr la paz, primero debemos luchar por nuestro derecho a vivir en libertad», dijo el artista la noche del sábado.
Desde Yucatán para el mundo, el intérprete de «María» y «Adrenalina» dijo que «como miembro de la Comunidad LGBT no pedimos más derechos que el resto de los ciudadanos, tampoco menos».
«Simplemente queremos igualdad; es muy simple»,aseveró.
Con esa misma pasión ofreció un concierto lleno de matices que fueron marcando los colores del arcoíris y brindando un recorrido de sus mejores éxitos.
El coro multitudinario cautivó al mismo Ricky Martin, quien se mostró muy agradecido con México, país que lo catapultó hasta los cuernos de la Luna.
En realidad Ricky cautivó mucho antes cuando recibió un reconocimiento en el Centro Internacional de Congresos de Mérida, estado mexicano de Yucatán, por el Concierto Yucatán For Peace.
Ante 30 laureados con los Premios Nobel de la Paz que concluyeron este sábado su cumbre de dos días y miles de personas de toda Latinoamérica, en el corazón del emblemático Paseo de Montejo, el boricua pidió igualdad para la humanidad.
«La igualdad, el respeto y la tolerancia tienen que ser parte de nuestra vida; el derecho de cada ser humano a vivir libremente tiene que ser respetado», dijo el intérprete en el Día Internacional de la Paz.
Ricky pidió a los activistas que luchan por la igualdad que «por favor no se den por vencidos, que sigan fuertes, pisando sólido».
«Lo tenemos que hacer por nuestros hijos y los hijos de nuestros hijos; sin esto no lograremos nunca la paz», añadió.
La ovación marcó el apoyo y el cariño de los yucatecos. «Los aplausos sonaron en toda Latinoamérica y en otros países del mundo», comentaron varios invitados.
Otros más consideraron que fue un «golpe» a la ignorancia de los diputados del Congreso de Yucatán, que no aceptan el matrimonio igualitario: «No sabemos por qué, si todos somos iguales, como dice Ricky Martin, pagamos impuestos».
El recinto, que albergó a los Premios Nobel de la Paz, como al guatemalteca Rigoberta Menchú Tum y el expresidente colombiano Juan Manuel Santos, vibró con aplausos desde que presentaron al cantante, pero aumentaron cuando comentó: «L raza, origen, orientación sexual y creencias deben ser respetadas por todos los Gobiernos que nos rigen».
«Me provoca mucha esperanza comprobar que las futuras generaciones se están formando a través de un espíritu de amor, equidad, justicia, tolerancia y compasión», indicó.
Juntos, añadió, podemos vencer la ignorancia y «el atropello a la dignidad humana que nos niega el acceso a las mismas oportunidades de vivir en inclusión y armonía».
Con el corazón conmovido agradeció el reconocimiento que recibió a nombre de miles de activistas «que me acompañan alrededor del mundo, quienes entregan su vida a la lucha por los derechos humanos y abogan por las víctimas de toda esclavitud moderna».
A la comunidad LBGT le manifestó su cariño.
«Son forjadores de extraordinarias iniciativas con soluciones transformadoras y beneficio colectivo, aunque siguen siendo objetivo de la discriminación, por la ignorancia», puntualizó.